En 2018 vio la luz la aplicación Storybook, luego de que Daniela Vega y Francisco Cornejo pensaran en un espacio para combinar cuentos, música y masajes para relajar a los niños y ayudarlos a conciliar el sueño.
Juntos emprendieron el proyecto que hoy es usado por dos millones de personas. La meta para la pareja cuencana es que 300 millones de usuarios usen su aplicación que está disponible para Android e iOS.
Aquel objetivo, poco a poco va tomando forma, ya que la aplicación recibió un fondo de Google con el que podrán continuar expandiéndose por el mundo.
Lo que está pasando ahora, ¿lo esperaban? ¿Lo imaginaban cuando empezaron desde cero?
Es algo que constantemente nos estamos preguntando y pellizcando para ver si esto es real. Creo que, cuando arrancamos, no teníamos idea a dónde iba a ir el proyecto. Lo que sí teníamos muy claro era que, lo que lograba Storybook era algo transformacional. Así que, el momento que entendimos esa palabra, supimos que, si se lo usa correctamente, con conciencia tiene la capacidad de transformar familias, de solidificar familias enteras. Por un lado, Storybook se habla mucho del sueño. Storybook ayuda en el sueño de los niños. Pero incluso hay un componente de salud emocional. Al momento que empezamos, cuando entendimos muy al principio con Storybook con los primeros usuarios, sabíamos que estábamos con algo muy grande entre manos.
Este proyecto surgió cuando estaban en Australia.
Sí. Fuimos a Australia porque me gané una beca de la Senescyt para hacer un máster. Entonces yo estudiaba y además tenía que trabajar mientras Dani se quedaba con los niños. Después pudo tomar un curso de masaje infantil y allí fue donde se certificó, y paralelamente en esta dinámica familiar surgió la idea de crear la aplicación.
Empezaron, como dijiste alguna vez, sin saber una línea de código. Cómo se adentraron en algo que no sabían
Es una buena pregunta. Creo que una buena parte de emprender significa aprender. En el camino, si uno no sabe la respuesta para algo, tiene acceso a personas que sí saben. Y eso es lo que yo tenía claro desde el día uno. No había hecho nunca una aplicación propia, pero sí había dirigido proyectos de iniciativas digitales, así que tenía las nociones y podía acercarme y buscar gente que sea mucho más hábil y que nos pueda ayudar.
¿Cómo fue proceso de ir armando la aplicación?
Básicamente al principio fue dónde podemos encontrar a alguien que haga nuestra visión realidad. Buscamos freelancer, personas con las que pudiéramos mantener costos al mínimo, sin arriesgar demasiado la inversión. Al poco tiempo, cuando vimos la atracción que tenía StoryBook, cuando vimos su poder transformacional, lo que primero que hicimos fue hacer dos contrataciones. Sabíamos que necesitamos tener dos desarrolladores porque es un mundo interactivo, porque necesitábamos hacer cambios. Y hasta hoy lo hacemos. Por lo menos, una vez a la semana, lanzamos una actualización de la aplicación. Y ya después de las dos contrataciones, trajimos personas que habían trabajado en Mercado Libre, y en otras empresas, que solidificaron esa base técnica. También trajimos personas que sabían de marketing. Ahora ya somos en total 20 personas en el equipo, en seis países.
Daniela es quien escribe los cuentos que se usan en la aplicación. Creo que es lo esencial, ¿no?
La Dani es el corazón de lo que hacemos. Es el centro de la empresa. Cuando ella crea los cuentos, y es la que hace la voz en español, es un proceso más complejo de lo que parece. Hay mucho detrás del cuento porque busca que tengan un altísimo nivel de valores, de morales. Busca que tenga educación. Los cuentos más populares que ha escrito habla sobre las emociones, cómo ayudar a que los niños calmen sus pensamientos, el respeto por los demás.
Ustedes acabaron de ganar 100.000 dólares por el Premio Google Fund for Startups y Mentorship. Habrá un antes y un después, ¿verdad?
Lo que pasa con Google es trascendental. Ganamos una inversión de 100.000 de Google de un fondo nuevo que sacaron para starups con fundadores latinos. Esto marca un antes y después porque nos ponen en una relación directa con Google. Más allá de los fondos también nos van a dar créditos de sus productos y mentorías y relaciones públicas a través de su equipo. El lunes que viene tenemos la primera reunión con ellos y podemos tener más claro lo que se viene.
Qué se puede decir a toda la gente de Ecuador después de lo que ustedes han logrado
Como cuencanos y como ecuatorianos lo que tenemos que hacer es empezar a apoyarnos. A creer en la capacidad de que podemos hacer cosas grandes. En mirar alto y no ponernos un techo muy bajito, sobre todo, al final del día, es el tema de apoyo. StoryBook no debería estar creciendo y triunfando en Estados Unidos, debería estar creciendo y triunfando, primero, en Ecuador, que es de donde surge, donde tenemos nuestros usuarios, nuestras actrices, nuestros actores que han participado. Allí es donde se incubó todo esto. Y ese cambio de paradigma se da solo entre nosotros. Lo que primero que debemos hacer es apoyar al talento local. (I)
