EEUU monitoriza tesoros culturales ucranianos para protegerlos de Rusia

El Instituto Smithsonian de Estados Unidos, que depende del Gobierno, monitoriza unos 26.000 tesoros culturales ucranianos para impedir su destrucción o robo por parte de Rusia.

«Existen precedentes» del robo de artefactos ucranianos, explicó este viernes el director del Centro de Patrimonio Cultural del Departamento de Estado estadounidense, Eric Catalfamo, en alusión a la anexión rusa de la península de Crimea en 2014.

En una sesión informativa, Catalfamo habló del trabajo que el Comité de Coordinación de Patrimonio Cultural, un grupo compuesto por miembros de varias agencias gubernamentales de EE.UU., realiza para prevenir y documentar la destrucción de patrimonio en el mundo.

El jueves, por ejemplo, el Departamento de Estado organizó un diálogo entre profesionales ucranianos y miembros de la comunidad de museos estadounidense para escuchar su opinión sobre cuáles son los problemas a los que se enfrentan sobre el terreno.

Además, funcionarios estadounidenses ofrecen asistencia y entrenamiento a sus colegas ucranianos para ayudarles a preservar monumentos y obras de arte amenazadas.

Aun así, la Administración reconoce que hasta ahora tan solo han podido registrar los daños y ofrecer consejo.

«El foco está en proteger el patrimonio cultural, las colecciones y monumentos dentro de Ucrania», explicó la directora de la Iniciativa de Rescate Cultural del Smithsonian, Corine Wegener, en respuesta a una pregunta sobre si se plantea el traslado de artefactos fuera del país.

Wegener aseguró que existe disposición por parte de los museos del mundo, especialmente los europeos, para ayudar a Ucrania de cualquier manera posible, pero que la decisión debe ser tomada por las autoridades culturales ucranianas.

«Hasta ahora no he escuchado ningún indicio sobre un plan parecido», afirmó la directora de la iniciativa.

El director del Laboratorio de Monitorización de Patrimonio Cultural del Museo de Historia Natural de Virginia, Hayden Basset, insistió en que su trabajo consiste en producir información para que sus socios ucranianos puedan decidir cómo actuar.

Desde que comenzó la guerra, el laboratorio ha registrado un total de 191 impactos potenciales en lugares de patrimonio en Ucrania utilizando información de satélite.

De ellos, 120 se han producido en monumentos, 58 en templos, diez en museos, dos en centros artísticos y uno en una excavación arqueológica.

El jueves, el presidente Joe Biden pidió al Congreso estadounidense 33.000 millones de dólares adicionales en financiación para Ucrania. El Departamento de Estado no pudo ofrecer información sobre si parte de este dinero se destinará a sus esfuerzos de preservación de patrimonio en el país. EFE