Presidente del Congreso critica decisión de Bolsonaro de auditar elecciones

Río de Janeiro (EFE).- El presidente del Congreso de Brasil, senador Rodrigo Pacheco, calificó este viernes como inadmisible el anuncio del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, de que contratará una empresa privada para auditar las elecciones presidenciales de octubre próximo.

Pese a ser un importante aliado del líder ultraderechista en el Congreso, Pacheco dijo que la responsabilidad por las elecciones es del Tribunal Superior Electoral y que contratar una auditoría privada para verificarlas es restarle credibilidad al organismo.

«La responsabilidad por el proceso electoral corresponde al Tribunal Electoral. A él le cabe garantizar la confianza de los brasileños y de la sociedad en la transparencia del proceso electoral», afirmó Pacheco en una rueda de prensa en el Palacio presidencial de Planalto.

«No le corresponde a ninguna entidad privada o a otra institución participar en el conteo o reconteo de los votos porque ese es el papel de la Justicia Electoral», agregó Pacheco, que este viernes ejerció interinamente la Presidencia de la República por los viajes al exterior de Bolsonaro y de su vicepresidente, Hamilton Mourao.

Bolsonaro, que asegura sin pruebas que el sistema de votación electrónico usado en Brasil es vulnerable a fraudes, anunció el jueves en una transmisión en directo por redes sociales que su formación, el Partido Liberal, decidió contratar una auditoría privada para verificar la transparencia de las elecciones.

«Está garantizado por ley que un partido pueda contratar una empresa para hacer auditoría», aseguró el mandatario, quien adelantó que el Partido Liberal ya inició conversaciones con una firma de «renombre mundial» para que realice una auditoría previa a los comicios para tener unas elecciones «libres de cualquier sospecha».

El anuncio del mandatario se entendió como un nuevo ataque al Tribunal Superior Electoral, al que desde el año pasado viene criticando fuerte y reiteradamente por defender el sistema electrónico de votación que se utiliza en el país desde 1996.

Bolsonaro, en tono irónico, afirmó que su auditoría servirá para garantizarle la elección al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, principal líder de la oposición y que lidera con amplio margen todos los sondeos de intención de voto para las elecciones presidenciales de octubre próximo.

Lula, que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, cuenta con una intención de voto cercana al 45 %, mientras que la del líder ultraderechista, que aspira a la reelección, apenas llega al 30 %.

«Lo normal en todo el mundo es que el jefe del Ejecutivo conspire para permanecer en el poder (…). Aquí es exactamente lo contrario. Ya que los sondeos dicen que Lula tiene el 40 % y que Lula va a ganar, entonces quiero garantizar la elección del Lula», aseguró.

Pacheco dijo que las declaraciones que ponen en duda el sistema electoral «no tienen razón» y amenazan las instituciones.

«Cualquier crítica institucional a las instituciones, críticas que no tienen justa causa, no tienen lastro probatorio o legitimidad, son críticas que no contribuyen y que, consecuentemente, pueden perjudicar el buen funcionamiento de las instituciones», dijo.

Agregó que una auditoría privada es legítima pero con límites y que, «obviamente», uno de esos límites es que no puede participar en el proceso de conteo de votos.

Bolsonaro ha insistido en poner en duda la credibilidad del sistema electrónico de votación y hasta ha llegado a sugerir que las Fuerzas Armadas realicen un conteo paralelo de los votos.

Por tales declaraciones ha sido acusado de querer «sabotear» las elecciones, de intentar desconocer una posible victoria de Lula y de incentivar un golpe de Estado en caso de ser derrotado. EFE