Lo que no se cuenta

Hernan Deleg Pacheco

Las aguas que bañan las costas de los países industrializados, donde existe un tráfico marítimo intenso; se lo declara “los más contaminados del mundo”.

Uno de los lugares más vulnerables en el sentido ecológico es el Golfo Pérsico con más del 60% del transporte marítimo mundial de petróleo y, derivados corresponde a este pequeño sector. El mar mediterráneo se ha convertido en un gran vertedero de contaminantes. La renovación total de sus aguas se produce solo en 80años.

El crecimiento de la industria, de las ciudades, el aumento de la densidad demográfica, entre otros, lleva al incremento de la contaminación y destrucción del entorno; pero lo más pernicioso es el biosistema del Mediterráneo; que se extiende desde la ciudad de Valencia/España a Livorno/Italia. Los desechos industriales y comunales; en un90% no se procesan, y hay que agregar a ello más de 300 mil toneladas de petróleo que se vierten cada año. Los peces capturados en el Mediterráneo contienen el triple de mercurio que los peces del mismo tipo en el Atlántico.

Ha aumentado la contaminación bacteriológica de los mares Tirreno y Adriático, llegando a 35 mil por litro de bacilos intestinales; y que decir de los mares que bañan el Japón; en los 20 sectores de los 69 investigados de la bahía de Tokio no se ha descubierto indicio alguno de vida. Igual se observa en las costas de Indonesia, en particular en el Golfo de Yakarta.

La reserva total de agua dulce esta alrededor de 2.7 %; parte se recupera lentamente y la otra está en los glaciares. El factor de contaminación está en las aguas toxicas industriales, y las sustancias químicas que se utiliza en la agricultura, y las lluvias acidas. El planeta es hermoso; lo que se tiene que hacer, es reencontrarse con su origen. (O)