Los pequeños productores también exigen más controles para que se respete su trabajo.
María Zhagüi recorre unos cuatro kilómetros en la parroquia Victoria del Portete, sur de Cuenca, para llegar al pastizal donde están sus vacas. La mujer extrae 18 litros de leche que entrega a un transportista que se dirige a los centros de acopio.
Su trabajo es remunerado, si tiene suerte, con seis dólares diarios, pues por cada litro de leche recibe 34 centavos a pesar de los sacrificios y dificultades que tiene que pasar para ordeñar a sus reses.
Se levanta a las 05:15 para vestirse con ropa abrigada y tomar una agüita caliente para soportar el frío de las mañanas. Alrededor de las 06:00 sale de su hogar llevando en su espalda una cantarilla pesada sujeta por una chalina.
Camina al costado de la carretera principal, con mucha precaución de que algún vehículo la atropelle ante la falta de aceras. Llega a las 06:45 al predio y se apresura en obtener la leche para entregarla al transportista que funge como una especie de intermediario ante las grandes empresas.
La jornada laboral de María la repiten muchas personas más que mantienen a sus familias con la producción lechera. Lo hacen a pesar de que no se les paga el precio oficial de 42 centavos por litro.
Los pequeños productores tienen la esperanza de que esta situación mejore tras la aprobación el pasado martes en la Asamblea Nacional de una ley que fomenta la producción, comercialización, industrialización, consumo, y, sobre todo, fija el precio de la leche y sus derivados.
Mariana Pérez, de 60 años, quien también reside en Victoria del Portete, produce diariamente 13 litros de leche. Mariana poco ha escuchado de la normativa aprobada, pero confía que será buena.
“Necesitamos de un precio más alto por litro de leche que se respete, ya que hay personas que nos compran demasiado barato”, aseveró.
Las dudas giran en torno a cómo se controlará el precio y la incursión en el mercado del suero de leche que afecta la comercialización, entre otras situaciones que esperan que la legislación tome en cuenta.
Aprobación
La Asamblea Nacional aprobó con 103 votos y 14 abstenciones el marco legal que, entre otros articulados, establece que el precio de sustentación al productor de litro de leche cruda se indexa en un 52,4 % al precio de venta al público.
Lo que significa que si la leche en funda se comercializa en las tiendas a 95 centavos, el valor que recibirán los productores por litro de leche cruda será de 49 centavos. Asimismo, si se vende a un dólar, recibirán 52 centavos.
Asimismo, se considera la creación del Consejo Nacional de la Leche y sus derivados que liderará el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Igualmente, se genera facilidad de créditos, entre otros articulados. Sin embargo, el presidente de la República tendrá la última palabra.
El mandatario tiene 30 días para hacer observaciones e incluso vetar esta ley que se trató por varios meses en el Parlamento. (BPR)-(I)
Falta de denuncias
La falta de denuncias por parte de los pequeños productores hace que no se pueda sancionar a intermediarios que cancelan por debajo del precio oficial del litro de leche. Así lo expresó Vanessa Abad, coordinadora zonal de Agrocalidad, quien teme que con esta nueva ley continúe esta situación porque no existe un reglamento que norme el valor por el transporte del producto hacia las industrias.
Por otro lado, Abad comentó que hasta el año anterior se efectuaron operativos interinstitucionales, donde a más de verificar el precio de la leche se constató su calidad y cuestiones tributarias.
Este tipo de controles no se han realizado en este año porque no los ha convocado el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Cada institución del Estado ha efectuado operativos por separado. (I)
