El máximo líder talibán aparece en una asamblea de religiosos en Kabul

El máximo líder de los talibanes, el mulá Hibatullah Akhundzada, hizo una atípica aparición en la gran asamblea de eruditos islámicos en Kabul, dejándose ver por primera en la capital afgana desde la victoria de los fundamentalistas en la guerra y su llegada al poder.

Akhundzada, que no ha sido visto o fotografiado desde la llegada al poder de los talibanes en agosto pasado, apareció en el encuentro que reúne a unos 3.000 eruditos islámicos y ancianos tribales en Kabul, según la agencia estatal Bakhtar.

Aunque no hay registros de la llegada del líder supremo de los islamistas al evento, que se celebra a puerta cerrada, sin acceso a la prensa, un audio de la intervención de Akhundzada fue difundido por el Gobierno y la agencia estatal.

Akhundzada es un rostro prácticamente desconocido, y solo una pocas imágenes, que se suponen antiguas, y mensajes de audio dan fe de su existencia.

«La victoria de la yihad afgana en general es una gran recompensa para todos los musulmanes del mundo y especialmente para el pueblo afgano. Que Allah acepte todos los sacrificios», dijo el líder talibán en su discurso difundido parcialmente por la agencia Bakhtar.

Los musulmanes del mundo «ahora esperan la implementación de la consigna de paz y seguridad, aunque la jihad se asoció con la destrucción, el resultado ha sido la paz y la prosperidad», dijo refiriéndose a su victoria tras dos décadas de guerra.

Akhundzada es el tercer líder supremo de los talibanes, nombrado en 2016 después de que su predecesor, Akhtar Muhammad Mansour, muriera en un ataque con drones estadounidenses en la provincia paquistaní de Baluchistán.

Desde al pasado 15 de agosto, cuando ocurrió la caída de Kabul, solo se ha informado de tres apariciones públicas del líder islamista, las dos primeras en en la ciudad meridional de Kandahar, cuna de los talibanes, donde Akhundzada pasa la mayor parte del tiempo.

La gran asamblea de eruditos, que concluirá mañana, fue convocada después de que representantes religiosos y miembros de la sociedad civil pidieran a los talibanes organizar la reunión para discutir el futuro del país.

Este encuentro ha sido usado en por gobiernos anteriores para pedir consejo sobre desiciones fundamentales del destino de la nación, el líder talibán sin embargo recordó hoy a los asistentes que es el Gobierno quien toma desiciones.

«Si me consideran como el emir de la Sharia, entonces deben seguir mis indicaciones, no soy un líder político simbólico ni vine a base de elección, los ulemas nos dan consejos y nosotros somos la fuerza ejecutiva», dijo.

La aparición de Akhundzada ocurre en medio de la alerta de la ciudad después de que ayer, la primera sesión de la asamblea concluyera de forma repentina tras un tiroteo en los alrededores del evento.

De acuerdo con los líderes talibanes estos fueron hechos por las fuerzas de seguridad del Gobierno que custodian el lugar, y no hubo contratiempos, si bien algunos representantes habían dicho momentos antes que los disparos fueron cometidos por personas sin identificar tratando de causar caos en el evento. EFE

El máximo líder talibán aparece en una asamblea de religiosos en Kabul

Kabul, 1 jun (EFE).- El máximo líder de los talibanes, el mulá Hibatullah Akhundzada, hizo hoy una atípica aparición en la gran asamblea de eruditos islámicos en Kabul, dejándose ver por primera en la capital afgana desde la victoria de los fundamentalistas en la guerra y su llegada al poder.

Akhundzada, que no ha sido visto o fotografiado desde la llegada al poder de los talibanes en agosto pasado, apareció en el encuentro que reúne a unos 3.000 eruditos islámicos y ancianos tribales en Kabul, según la agencia estatal Bakhtar.

Aunque no hay registros de la llegada del líder supremo de los islamistas al evento, que se celebra a puerta cerrada, sin acceso a la prensa, un audio de la intervención de Akhundzada fue difundido por el Gobierno y la agencia estatal.

Akhundzada es un rostro prácticamente desconocido, y solo una pocas imágenes, que se suponen antiguas, y mensajes de audio dan fe de su existencia.

«La victoria de la yihad afgana en general es una gran recompensa para todos los musulmanes del mundo y especialmente para el pueblo afgano. Que Allah acepte todos los sacrificios», dijo el líder talibán en su discurso difundido parcialmente por la agencia Bakhtar.

Los musulmanes del mundo «ahora esperan la implementación de la consigna de paz y seguridad, aunque la jihad se asoció con la destrucción, el resultado ha sido la paz y la prosperidad», dijo refiriéndose a su victoria tras dos décadas de guerra.

Akhundzada es el tercer líder supremo de los talibanes, nombrado en 2016 después de que su predecesor, Akhtar Muhammad Mansour, muriera en un ataque con drones estadounidenses en la provincia paquistaní de Baluchistán.

Desde al pasado 15 de agosto, cuando ocurrió la caída de Kabul, solo se ha informado de tres apariciones públicas del líder islamista, las dos primeras en en la ciudad meridional de Kandahar, cuna de los talibanes, donde Akhundzada pasa la mayor parte del tiempo.

La gran asamblea de eruditos, que concluirá mañana, fue convocada después de que representantes religiosos y miembros de la sociedad civil pidieran a los talibanes organizar la reunión para discutir el futuro del país.

Este encuentro ha sido usado en por gobiernos anteriores para pedir consejo sobre desiciones fundamentales del destino de la nación, el líder talibán sin embargo recordó hoy a los asistentes que es el Gobierno quien toma desiciones.

«Si me consideran como el emir de la Sharia, entonces deben seguir mis indicaciones, no soy un líder político simbólico ni vine a base de elección, los ulemas nos dan consejos y nosotros somos la fuerza ejecutiva», dijo.

La aparición de Akhundzada ocurre en medio de la alerta de la ciudad después de que ayer, la primera sesión de la asamblea concluyera de forma repentina tras un tiroteo en los alrededores del evento.

De acuerdo con los líderes talibanes estos fueron hechos por las fuerzas de seguridad del Gobierno que custodian el lugar, y no hubo contratiempos, si bien algunos representantes habían dicho momentos antes que los disparos fueron cometidos por personas sin identificar tratando de causar caos en el evento. EFE