Gobierno y vialidad

Marco Salamea

La problemática vial que vive una buena parte del país, se ha agudizado durante los últimos días por las inclementes lluvias y derrumbes. Se trata de una problemática que durante los últimos años ha golpeado particularmente a la región austral del Ecuador, y especialmente a la provincia del Azuay y su capital Cuenca.

Ni siquiera la presencia de un ministro de Obras Públicas cuencano, durante la primera parte del Gobierno del presidente Lasso, y la presencia de un vicepresidente de la República también cuencano, han servido para por lo menos mitigar de una manera sostenida los problemas viales que Cuenca y el Azuay sufren de manera crónica. Y esto sobre todo debido a que, como consecuencia del deterioro de la inversión pública que es parte de la política del Gobierno actual, el problema de la vialidad  no asomaría como un tema prioritario de su gestión; así tampoco asomarían como temas prioritarios el tema de la salud y educación pública, el tema de cómo mejorar  los servicios públicos, el tema de cómo lograr el combate eficaz a la criminalidad y a la  espeluznante ola  de  asesinatos; amen de temas como el desempleo, el crecimiento de la pobreza y la emigración.

En el caso de Cuenca hace unos días se constituyó una “Asamblea Ciudadana por la Vialidad del Azuay”, como una instancia para unir fuerzas ciudadanas y exigir al Gobierno la atención urgente a los problemas viales, agravados por los reiterados cierres viales en las carreteras que nos permiten la conectividad con otras provincias y ciudades; a lo que une el problema del acceso a Cuenca por la panamericana sur, para el que se ofreció una solución que hasta ahora no llega.

En la visita realizada esta semana a Cuenca el Presidente Lasso ofreció la realización de los estudios para una nueva vía (o “autopista”) a Guayaquil; sin embargo, si esto se da, luego su construcción requerirá varios años y un gran financiamiento. Mientras tanto el Gobierno, a través de su ministro de Obras Públicas, no ha establecido ningún compromiso ni cronograma para resolver los problemas actuales, signados por el creciente deterioro y aislamiento vial que soportamos. Una situación que ha provocado el justo reclamo por parte de la citada Asamblea Ciudadana.