La zona baja de Pucará tendrá su alcantarillado

Los sectores Sarayunga, Chilcaplaya y La Cascada se beneficiarán del proyecto. Los trabajos se retomaron en enero tras una suspensión de más de un año.  

Tres comunidades de la zona baja del cantón Pucará tendrán a mediados de año su alcantarillado, luego que se superó una paralización de obra por más de un año, debido a la necesidad de recursos económicos para trabajos complementarios. Se trata de Sarayunga, Chilcaplaya y La Cascada, donde residen aproximadamente 500 familias.

El proyecto es financiado por la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEP EP) por concepto de compensación al encontrarse estas comunidades en la zona de influencia de la central hidroeléctrica Minas-San Francisco. Los trabajos iniciaron a mediados de 2021; sin embargo, se suspendieron en noviembre del mismo año porque la municipalidad tuvo que gestionar más recursos en la CELEC EP para ejecutar rubros que no constaron en la propuesta municipal inicial valorada en cerca de un millón de dólares.

La administración necesitaba recursos, por ejemplo, para reponer la calzada que tuvo que ser levantada para colocar tuberías en la vía estatal Cuenca-Girón-Pasaje de acuerdo a las especificaciones técnicas del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP). Según Adrian Arce, jefe de Agua Potable y Saneamiento del Municipio de Pucará, esta cartera de Estado -quien tiene la competencia sobre la carretera- le solicitó al Ayuntamiento que se coloque una carpeta asfáltica de seis pulgadas y no de dos como se tenía previsto.

“La CELEC EP nos financió para contar con 180 mil dólares más porque como municipio no tenemos un presupuesto elevado. Para fines de 2022 ya contamos con la aprobación de esta empresa del Estado. Es así como retomamos en enero del presente año los trabajos”, citó Arce.

Avance

El proyecto, que está a cargo de una contratista, registra un avance general del 70 %. Se divide en dos sistemas con sus respectivas plantas de tratamiento de aguas residuales y redes, uno para la comunidad de Sarayunga con un avance del 75 %; y otro, lo compartirán los sectores de Chilcaplaya y La Cascada, con 85 %.

Las plantas se caracterizarán por contar con un decantador auxiliar, retenedor de aceites y grasas, una fosa séptica de doble cámara con filtro biológico anaeróbico y un lecho de secado de lodos. Es decir son infraestructuras modernas para el tratamiento de las aguas residuales que generan los habitantes de estas localidades.

Arce comentó que se trabaja en conexiones hidráulicas y otros trabajos de terminación de obras en las plantas de tratamiento, así como en conexiones domiciliarias. También se asfaltará el tramo de la vía estatal que fue abierto para la intervención.

El técnico espera que no se presenten más retrasos en la obra. Aunque teme que el cierre vial del kilómetro (km) 112, en el sector Gramalote, por el cambio de una alcantarilla para recuperar la calzada, podría afectar las labores del proyecto de saneamiento.  (BPR)-(I)

Se benefician 500 familias de la zona

El proyecto de saneamiento ambiental que se ejecuta en la zona baja del cantón Pucará beneficia a cerca de 500 familias que suman más de 2.000 personas.

En la comunidad Sarayunga se concentran unas 350 familias, mientras entre Chilcaplaya y La Cascada cerca de 150 familias del total de beneficiarios del alcantarillado.

Para Leonel Cedillo, representante de la comunidad Sarayunga para dar seguimiento al proyecto, los trabajos avanzan, pero se tendrá que dar más énfasis en la planta de tratamiento para cumplir en el tiempo estipulado.

Cedillo comentó que contaban con un sistema de alcantarillado de más de 20 años de antigüedad, el cual, ya cumplió con su vida útil. “Necesitamos que esta obra concluya porque también nos permitirá usar el camal”. (I)

Detalles

3 comunidades del cantón Pucará se beneficiarán con el alcantarillado. Según el municipio, más de 2.000 personas residen en la zona.

– Las comunidades beneficiadas con el proyecto de saneamiento ambiental se ubican en los límites de las provincias de Azuay y El Oro.

– La obra se ejecuta con recursos de la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC EP) por compensación debido a la presencia de la central hidroeléctrica Minas-San Francisco.

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