Corte de loros

CON SABOR A MORALEJA Bridget Gibbs Andrade

Los españoles acudieron a las urnas el domingo anterior para elegir a los gobernadores de cada provincia del país. En esta ocasión, el partido Popular (PP) despojó al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) seis de las diez comunidades que gobernaba desde el 2019. La presidenta del PP, Isabel Díaz Ayuso, fue reelecta en la Comunidad de Madrid luego de cuatro años de gobierno. Ante la derrota inesperada de su partido el presidente español, Pedro Sánchez, anunció el sorpresivo adelanto de las elecciones generales para el 23 de julio, las que estaban previstas para diciembre, con el afán de contrarrestar cualquier avance de la derecha de seguir sumando electores a sus filas. En otras palabras, se está jugando su última carta para tratar de que los socialistas conserven el poder. Algunos politólogos opinan que pretende movilizar votantes de izquierda al presentarles el dilema de elegir entre un gobierno progresista como el suyo o permitir que el conservador PP se alíe con la ultraderecha de Vox.

Después de la derrota socialista el domingo 28 en la que el PP logró el 31.5 % de votos (casi 2 millones más que en el 2019) frente al 28 % del PSOE (que perdió 430.000 votos respecto al 2019), parece que Sánchez intenta evitar, con el adelanto electoral, que su propio partido se siga desgastando y finalmente agonice hasta que llegue diciembre -mes en el que se iban a celebrar las votaciones- luego de la ganancia incómoda que infligió la derecha en España. Tras los últimos comicios, el PP tendrá que negociar con el ultraderechista Vox para poder ganar gobiernos locales y regionales lo cual deberá hacerlo antes de la campaña de las elecciones del próximo 23 de julio.

Voceros del PSOE han minimizado la derrota significativa que padecieron y manifestaron que la última voz la tiene la ciudadanía que decidirá si quiere frenar el avance de la derecha y la ultraderecha en España o que siga viento en popa. “Hacemos un llamado a los progresistas a sumarse y votar para evitar que la derecha se instale en el país y nos arrebate todo lo que hemos logrado en estos últimos años”, dijeron. Como si hubiesen conseguido avanzar significativamente como sociedad y como país. Es el mismo discurso engañoso que nace de las mentes socialistas. Nada más recordemos las peroratas que hasta hoy recita el prófugo como lora, junto a su corte de loros desplumados.  (O)