Hasta hace unas semanas, la física había sido un gran problema para Evelyn Gutama, una joven de 17 años, de la parroquia San Joaquín, que se inscribió en “Jóvenes rurales”, un programa de la Universidad de Cuenca dedicado a la nivelación de todos aquellos aspirantes a estudiar una carrera de educación superior.
Si bien todavía le cuesta entender ciertos contenidos sobre la materia de física, hubiera sido distinto si no formara parte del programa de la universidad cuencana, que precisamente tiene ese objetivo: ofrecer tutorías a los estudiantes de las zonas rurales de Azuay, Cañar y Morona Santiago para que sus posibilidades de entrar a una universidad sean mejores.
Y es que la diferencia entre los estudiantes de las zonas urbanas y rurales continúa siendo considerable, no solo en nivel socioeconómico. La falta de conectividad y los conocimientos que se vuelven limitados se reflejan una vez que los jóvenes intentan ingresar a la universidad.
Un ejemplo de ello lo vivió Fernando Guapisaca con la materia de física, una vez que empezó a seguir las clases de nivelación que está desarrollando la Universidad de Cuenca.
“Es un cambio drástico lo que vemos en el colegio con lo que se necesita en la universidad para entrar. Con el programa estoy viendo cosas que no aprendí en el colegio, pero estoy aprendiendo en la universidad”, dijo Fernando, oriundo de la parroquia Paccha, cuyo objetivo es estudiar arquitectura.
No solo los estudiantes son los que se dan cuenta de que hay muchas cosas que desconocen. Los profesores, que fueron contratados para el programa de nivelación, asimismo ha visto que la brecha académica sigue latente.
“Hay una diversidad entre los grupos que están aquí. Hay estudiantes que son súper buenos, solo hay que refrescarles el conocimiento y ya está, pero hay otros muchachos que ni siquiera pueden multiplicar bien”, contó María José Torres, profesora de matemáticas.
Para Torres, lo que se ve es un problema que se viene arrastrando y que la Universidad de Cuenca intenta, de alguna manera, apagar ese incendio para darles una oportunidad de mejorar sus condiciones hasta que les toque rendir la prueba de admisión.
Resultados del programa
No es la primera vez que la Universidad de Cuenca organiza Jóvenes Rurales. El año anterior ya realizó una edición que estuvo enfocada en los estudiantes de tercero de Bachillerato del Azuay.
En aquel entonces ya se notaron las deficiencias entre los adolescentes y jóvenes en cuanto a conocimientos se refiere. No obstante, con el acompañamiento, la realidad fue cambiando.
De los 748 estudiantes que rindieron la prueba de admisión en el 2022 y que participaron en Jóvenes Rurales, 428 obtuvieron un cupo en una de las universidades del Ecuador.
Los resultados alentaron a que la institución superior ofrezca un nuevo programa que se extienda entre los jóvenes de la zona 6.
“Este programa no es solo un acompañamiento para nivelarse. Les acompañamos al momento de postulación, cuando se matriculan, y una vez que acceden al cupo, ellos tienen una beca en el primer año. Lo que esperamos es que varios de ellos estén en la fila de las matrículas”, dijo Alexandra Guillén, coordinadora de Jóvenes Rurales.
El programa de nivelación finalizará el 17 de junio. Con ello se espera que los jóvenes participantes se inscriban en el examen que la Universidad de Cuenca, y, sobre todo, obtengan un cupo para que se profesionalicen en el área de su gusto. (I)
