Deseos de año nuevo

Ante todo, gracias a Dios por mantenernos con vida, y gracias de corazón a todas las personas que se mantienen a nuestro lado. Hemos terminado un año con más penas que alegrías; un año funesto en lo social, económico, político y moral. Hay tanta gente que saqueó el país, que conspiro contra la paz y la democracia, que intrigó y colaboró para la destrucción de la nación, pero que andan sueltos y campantes gracias a nuestra justicia depravada. Ante todo esto, notamos un pueblo mudo, amnésico, impávido, sin reacción; ¡creo que nos robaron hasta la dignidad y el valor! Hagamos votos porque este nuevo año el pueblo recupere su libertad, su amor propio y su capacidad de reacción frente a los atropellos de la justicia corrupta. Esperamos que cese la venganza, la codicia, el odio y la lucha desleal entre los partidos políticos que se preparan para las próximas elecciones, sobre todo de parte de los “sociolistos”, cuyos tentáculos luego de devorar nuestros postreros recursos, traspasaron los límites fronterizos y hoy abrazan y protegen a bandas narco delictivas a nivel internacional. Deseamos que nuestro próximo presidente, luche en forma seria y responsable contra la corrupción, el narco tráfico y la delincuencia en general. Que se preocupe definitivamente por la salud, la educación, por la agro industria, la inversión extranjera y por la creación de fuentes de trabajo. Recordemos que nos toca afrontar un año muy duro, con elecciones, donde se juega el futuro de muestra patria, obviamente el de nuestros hijos y nietos; aprestémonos a votar con inteligencia, valentía y dignidad, salvémosle al País y no dejemos que se hunda en la miseria, como la que están padeciendo Cuba, Nicaragua,  Venezuela, Etc. Tengamos fe y no perdamos la esperanza, todavía se puede divisar una luz al final del túnel; esperemos que definitivamente Dios se apiade de nosotros y que le salve al Ecuador de las garras de las bandas narco delincuenciales.  Como el que más deseo, que el próximo año no volvamos a sentir los mismos temores, que no despertemos con los consabidos fantasmas, y no resucitemos nuestros miedos, mantengamos la férrea voluntad de libertad y justicia.  Les deseo un buen año para cada uno de sus hogares apreciados lectores. (O)

Dr. Francisco Chérrez

Médico Pediatra. Expresidente de la Sociedad de Pediatría del Azuay. Expresidente de la Federación ecuatoriana de Pediatría. Exjefe de Residentes del Hospital Vicente Corral Moscoso. Autor de libros.

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