De acuerdo a la real academia de la lengua, la palabra incongruente habla del sujeto que lo que hace o lo que dice no tiene sentido o coherencia, sus actos son inconsecuentes, falto de toda lógica. La megalomanía habla de un trastorno de la personalidad, relacionado con la importancia o el poder que quiere darse una persona respecto a su capacidad o conocimientos (¡algunos llegan a creerse que son dioses!). Donald Trump, inició su mandato de la poderosa nación norteamericana, con una serie de incongruencias, que rayan en la prepotencia y hasta en el desafío, sobre todo hacia Latinoamérica. Inicia la deportación de migrantes con irrespeto a los derechos humanos; la policía de migración y los agentes federales con total menosprecio invaden casas, escuelas, colegios, negocios, etc., y como vil delincuentes, esposados y encadenados, les deportan a sus países de origen, sin miramientos de ninguna naturaleza, incluidos los que tienen antecedentes delictivos y los ciudadanos comunes que fueron en busca de un mejor porvenir. Ante las protestas generales de países latinos, y sobre todo ante la declaración del presidente Petro, de que inmediatamente decide el bloqueo de los vuelos de deportación militar desde Estados Unidos, Trump ordena la subida de aranceles al 25% para todos los productos colombianos, lo que podría causar una debacle y un caos económico en el país hermano; además de suspender la solicitud de visas para los colombianos. Realmente se está causando una crisis humanitaria en todos los países que están recibiendo repatriados, observándose escenas que laceran el corazón. Como si esto fuera poco, el prepotente presidente de norte américa, pretende anexar a los países de Canadá y México, como parte de la unión americana; además de querer cambiarle el nombre del golfo de México, por el de golfo de América. No contento con esto, anuncia tomarse la gran Isla de Groenlandia, ubicada entre Canadá e Islandia, pero que le pertenece a Dinamarca. Y para completar su agenda de desafueros, promete recuperar el canal de Panamá, que fue asignado a este país en 1977, tras el acuerdo firmado entre los presidentes Omar Torrijos y Jimmy Carter. ¡Qué pena que, a estas alturas de la vida, haya seres humanos megalómanos que se creen dueños del mundo y de los seres humanos!! (O)
Dr. Francisco Chérrez
Médico Pediatra. Expresidente de la Sociedad de Pediatría del Azuay. Expresidente de la Federación ecuatoriana de Pediatría. Exjefe de Residentes del Hospital Vicente Corral Moscoso. Autor de libros.
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