Pinceladas compartidas

Eduardo Sánchez Sánchez

En los genes se porta el gran paquete de la información y la herencia; así, en la familia Burbano, hay un arte innato que fluye en sus venas.
Se recuerda en el nido íntimo, que fue el gran Honorato Vázquez Ochoa, el iniciador de esta elegante práctica de plasmar en oleos una variedad de imágenes de rincones familiares, jardines, montañas, nevados, flores y bodegones. Continuó con esa noble virtud su sobrino, el Dr. José Rafael Burbano Vázquez, padre del Arq. César Burbano Moscoso de muy grata recordación en su quehacer universitario y artístico. Fue él, precisamente, el progenitor  de los Burbano Carvallo: Martha, Charo, César, Rómulo, Magdalena y María Soledad, abuela de Ana Isabel Coellar Córdova, heredera de sus bondades artísticas.        

Su mundo diario está inmerso en la creatividad, en el color y las formas, en la elegancia de aplicar técnicas que gestan una composición de dibujos, figuras, policromía y texturas que muestran arte por estética en el mundo pictórico que ha creado María Soledad Burbano.

La pintura es una expresión artística de muy vieja data, una de las siete Bellas Artes universales, que crea y muestra la belleza retenida y lleva al disfrute de los ojos y el corazón, que aprecian y saborean las nobles cualidades de las obras de quienes poseen este singular atributo: ser artistas y trasladar lo efímero a lo perdurable, lo circunstancial y subjetivo a la inmortalización impregnada en la obra.

En la creación de María Soledad, la vida emerge de sus cuadros y lo hace en un festival de danza, de luz y color que se forjó en su personalidad, en el crisol hogareño, donde sus padres fueron cultores de la belleza buscada en lo sencillo y elemental, en la naturaleza, como la magna obra de un Supremo Creador.

Su técnica preferida durante 50 años ha sido el óleo, con el cual creó verdaderas maravillas que las disfrutamos en amplitud mayúscula volando, con imaginarias alas, que nos brindan quienes comparten su facultad y virtuosismo con el público.

Un premio a nuestros sentidos es visitar la fina muestra de abuela y nieta, titulada “Pinceladas compartidas”, expuesta en la antigua Escuela Central, galería que se engalana con la sensibilidad y finas cualidades de estas artistas de refinada cepa. (O)

Dr. Eduardo Sánchez

Doctor en Química por la Universidad de Cuenca. Excatedrático de la Universidad de Cuenca. Director del Proyecto “Reproducción de orquídeas por semillas”. Conferencista y articulista internacional.

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