La semana arrancó con tres noticias sobre la corrupción en el Ecuador. Y está cerrando con un legislador que cobra diezmos.
La primera dice que, de acuerdo a los datos de organismos internacionales, nuestro país perdió durante estos catorce últimos años, setenta mil millones de dólares por corrupción. La Segunda da cuenta de que la Fiscalía decidió enjuiciar por peculado a dos ex ministros de Defensa y a una docena de ex funcionarios, responsables de la compra de los helicópteros Dhruv. La tercera: en la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, cada día se descubren nuevas fallas graves. El proyecto, que inicialmente debía costar unos mil seiscientos millones de dólares, terminó por obra de la corrupción, costando más de tres mil millones y ahora funciona al cincuenta por ciento de su capacidad.
Setenta mil millones de dólares perdidos por la corrupción. Los autores, están fugados del país. Los pocos que están presos no han devuelto nada de lo robado. Como señaló el Presidente de la República, la mayoría, estarán presos cuatro o cinco años y saldrán- paradójicamente- por buena conducta a disfrutar ellos y varias generaciones de los millones robados.
En el caso de los helicópteros Dhruv, más de una década después, los autores de esa estafa siguen libres. No hay condenados por la muerte del General Gabela, de quien – no hay dudas – fue asesinado por denunciar el negociado de siete helicópteros, de los cuales cuatro cayeron, uno casi el mismo día de la presentación en medio de la parada militar.
El Ecuador es el país del mundo que tiene más comisiones y programas anti, contra, recontra y requetecontra corrupción. Es también el país que menos ha recuperado dineros robados. Y el que menos sentenciados tiene. Por eso es que hay tanto pícaro que entra a la política para hacer dinero. Saben que a la final nada les pasará. (O)