El día lunes 27 de enero, la Directora de Cultura, Recreación y Conocimiento del Municipio de Cuenca, Adriana Tamariz, fue separada de su cargo luego de que tuviera lugar el acto artístico realizado por Mestizo el viernes 24 de enero, en el que se criticaba el accionar del gobierno central durante el paro nacional. Los abajo firmantes rechazamos esa medida y emitimos el siguiente comunicado:
Durante el mes de octubre de 2019, el Ecuador vivió 12 días de una lucha en todo el territorio nacional, encabezada por grupos afroecuatorianos, amazónicos, indígenas, estudiantes universitarios, obreros y la ciudadanía en general, que manifestaron masivamente su desacuerdo y descontento por las nuevas decisiones económicas asumidas por el gobierno central en el marco de su compromiso con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Este levantamiento forma parte de un contexto de revueltas regionales que responden a la inconformidad política en diversos países de Latinoamérica como Bolivia, Chile, Haití, Colombia y Brasil, entre otros, que levantaron una voz de lucha que sacudió los discursos sobre el modelo económico imperante.
Pocos meses después, en la ciudad de Cuenca, nos encontramos en el esperado año de Bicentenario, el cual debería ser un espacio idóneo para la reflexión crítica acerca del pasado, el presente y el futuro de la ciudad en el marco regional. Dando inicio a esta conmemoración, la Dirección de Cultura del Municipio de Cuenca fue la encargada de realizar el lanzamiento de la agenda bicentenario el viernes 24 de enero de 2020 en la Plaza San Francisco. Para dicha fecha, se contrató un espectáculo musical que contó con uno de los exponentes musicales más reconocidos del Azuay, denominado Mestizo, un proyecto transdisciplinar que agrupa música y sonoridades ancestrales, performance, teatro y artes visuales.
La presentación inició con una reproducción del discurso de Mirian Cisneros, mujer amazónica de la nacionalidad sarayaku, que se pronunció la noche del 13 de octubre en cadena nacional, en él se denunciaba la violencia estructural y represiva perpetrada por el estado central durante los días de protesta. A continuación de esta introducción, el dj desarrolló una presentación de 30 minutos de música electrónica fusión. En el evento estaban presentes autoridades del Cantón, quienes manifestaron diversos criterios. El lunes 27 de enero, Adriana Tamariz, entonces Directora del Cultura, Recreación y Conocimiento, fue convocada a la Alcaldía de Cuenca a una reunión con el alcalde Pedro Palacios Ullauri, quien solicitó su renuncia ante las críticas emitidas por Mestizo hacia el gobierno central. Acto seguido, solicitó los nombres de los funcionarios responsables de la producción del evento y contratación de Mestizo.
La Constitución de la República del Ecuador, en su artículo 16, garantiza que “todas las personas, en forma individual o colectiva, tienen derecho a: 1. Una comunicación libre, intercultural, incluyente, diversa y participativa, en todos los ámbitos de la interacción social, por cualquier medio y forma, en su propia lengua y con sus propios símbolos”. El artículo 21 profiere que “las personas tienen derecho a construir y mantener su propia identidad cultural, a decidir sobre su pertenencia a una o varias comunidades culturales y a expresar dichas elecciones; a la libertad estética; a conocer la memoria histórica de sus culturas y a acceder a su patrimonio cultural; a difundir sus propias expresiones culturales y tener acceso a expresiones culturales diversas.” Además, el artículo 23 dice que “las personas tienen derecho a acceder y participar del espacio público como ámbito de deliberación, intercambio cultural, cohesión social y promoción de la igualdad en la diversidad. El derecho a difundir en el espacio público las propias expresiones culturales se ejercerá sin más limitaciones que las que establezca la ley, con sujeción a los principios constitucionales”. Finalmente, en el artículo 66 “se reconoce y garantizará a las personas (…) 6. El derecho a opinar y expresar su pensamiento libremente en todas sus formas y manifestaciones.”
Por todo lo anteriormente expuesto, los abajo firmantes queremos expresar nuestra inconformidad ante la debilidad de un gobierno municipal que, tras las presiones de un estado central autoritario, optó por la censura a las libertades artísticas. Vale recalcar que durante los últimos meses el país ha vivido repetidas acciones de censura, represión y persecución que han incluido cierre de radios, despidos injustificados y presión a diferentes actores de la política nacional. En este sentido, si bien la censura en esta ocasión no se efectuó previo al evento sino a posteriori, la separación de Adriana Tamariz de la Dirección de Cultura promueve la consolidación de un estado persecutorio en el que la disidencia de pensamiento y de opinión es vetada y castigada.
Asumimos el espacio artístico como posibilidad de divergencia, en el que las diversas maneras de representación evidencian la variedad de criterios y visiones, así como la disputa que es propia al campo de lo social. Consideramos que las instancias públicas deben garantizar la expresión artística en su diversidad y respetar el mandato constitucional que garantiza la libertad de expresión. Por ello afirmamos que:
1. Ninguna autoridad debe vetar la libertad artística y de expresión.
2. Los equipos técnicos especializados deben trabajar para promover la ejecución en libertad de las más diversas manifestaciones artísticas.
3. Los espacios públicos y los espectáculos contratados con fondos públicos deben estar abiertos a la diversidad y a la disidencia.
4. La censura o separación de funcionarios públicos por motivos ideológicos atenta contra los derechos constitucionales de la ciudadanía en general.
5. Como sector cultural tenemos la responsabilidad de ser veedores de los procesos institucionales y de denunciar cualquier atropello de los derechos de la ciudadanía.
El corazón de esta carta pretende crear un antecedente en el que, como sector cultural y ciudadanía en general, rechazamos tajantemente las visiones de la cultura que buscan limpiar o emborronar la disputa; rechazamos el que en un momento de precarización y vulneración por el modelo económico neoliberal, ante el cual los ciudadanos salimos a la calle a defender nuestros derechos, las autoridades busquen desconocer la disputa con gestos simbólicos como los de ‘barrer las calles de la ciudad’; que repudiamos la repetida incidencia del gobierno central en la política local, que ya manchó las celebraciones del bicentenario en la ciudad, cuando en noviembre del año pasado cercó el parque Calderón prestando oídos sordos a las protestas de los cuencanos; que defendemos la memoria social en los espacios (como la Plaza San Francisco) que han servido para escenificar la disputa, buscando la convergencia de las distintas voces en libertad de expresión; que nos enfrentaremos siempre a la censura y a la represión. Así también, queremos respaldar la gestión de Adriana Tamariz y su equipo trabajo, la cual ha buscado la creación de políticas públicas culturales y de procesos planificados, articulados y democráticos que garanticen los derechos culturales de la ciudadanía, sin someterse a las presiones de censura por parte de las autoridades de la ciudad, a través de la correcta estructuración de los procesos llevados por la Dirección de Cultura.
A favor de la libertad de expresión, de la diversidad, de la construcción plural del futuro, en contra de la vileza y de los intereses mezquinos de políticos y autoridades, los abajo firmantes nos pronunciamos.