Crisis educativa

Eduardo Sánchez Sánchez

OPINIÓN|

Educar significa guiar o conducir, transmitiendo conocimientos que permitan el desarrollo de las potencialidades de cada persona a través de la docencia que proviene del verbo latino docere (enseñar) por parte del maestro que significa el mejor, quien más sabe. La educación  desarrolla las potencialidades del estudiante. Así se transmite la cultura, la tecnología, pero también los sentimientos y valores que tienen que ser mostrados no como teóricos sino actos ciertos y de vida, con el ejemplo y no sólo con enunciados y hoy electrónicos.

El estudiante desarrolla las facultades físicas, intelectuales, morales y se pule para el crecimiento futuro cuando deba poner en práctica todo el acervo que sirvió de nutrimento en su formación. El Estado tiene la obligación de guiar a su población con la educación desde la infantil hasta la superior y no estoy seguro de cómo estamos alimentando a las nuevas generaciones, o por lo menos existen cambios radicales con respecto a lo que se hizo antaño.  Con seguridad se olvidaron asignaturas básicas que enseñen el lugar natal, la moral, el respeto por los mayores, existe una celeridad en todos los órdenes merced a las redes que invaden todos los espacios y contaminan de asuntos ajenos y muchas veces anti valores, de suerte tal que los frutos ya se cosechan y tenemos políticos que laceran como praxis normal al pueblo con una actitud delincuencial y más tarde prima el escándalo y brilla la impunidad,

Por último la pandemia cierra los centros educativos y lanza on line a quien caiga, a sabiendas de que los niños se distraen y se convierte en una tarea para los padres, muchos párvulos no poseen internet y por más que suben a la copa de un árbol no acceden al complejo y distal mundo del aprendizaje. La crisis educativa es preocupante y el futuro depende de lo que hagamos hoy. (O)