La covid vuelve a las residencias españolas de ancianos, aunque menos letal

Madrid.- La covid-19 se ha colado de nuevo en las residencias españolas de ancianos y, desde hace siete semanas, cuando empezó la quinta ola del contagio, todos los indicadores empeoran día a día, con cifras que no se veían desde febrero, aunque ahora es menos letal gracias a las vacunas.

El escudo ante la infección, reclaman profesionales del sector, es inyectarles una tercera dosis de vacuna (no aprobada por ahora en España) y la inmunización obligatoria de los trabajadores de esos centros.

La vacunación comenzó en España por los grupos de más edad. «Hay que comprobar si se ha reducido la inmunidad frente a la covid-19 en los mayores», que completaron las dos dosis necesarias entre mediados y finales de febrero, explica a Efe Gustavo García, de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales.

Y mientras se hace ese estudio, se debe programar la tercera dosis de la vacuna tanto para residentes como para sus cuidadores, añade.

Alerta de la urgencia de aplicar con rigor las medidas de detección precoz para evitar un nuevo confinamiento en los centros residenciales. «Encerrar de nuevo a los mayores podría ser más letal que el propio virus», advierte García.

Desde las organizaciones patronales de las residencias se pide que la vacunación sea obligatoria (ahora no lo es para nadie) para las personas que atienden a los dependientes y mayores. Algo menos del 10 % de quienes trabajan en residencias se ha resistido a vacunarse.

Además, proponen que las visitas que reciben los ancianos sean también de personas vacunadas completamente.

EL DOBLE DE MUERTES EN UNA SEMANA

La incidencia de la quinta ola comenzó a remitir hace dos semanas en España y este martes se situó en 528,3 casos de media por cien mil habitantes en 14 días, y bastante más alta entre adolescentes y jóvenes, menos vacunados hasta ahora que otros grupos de edad.

Todo el país sigue en riesgo extremo y los efectos en las residencias se agravaron en la última semana. De 37 fallecidos se pasó al casi el doble, 71 en siete días (eran 8 a mediados de julio), siendo el número más alto desde la semana del 21 al 28 de febrero.

Pese a todo, el efecto de la vacunación masiva en las residencias se percibe en el descenso de la letalidad, que pasó del 20 % de los casos en el inicio de la pandemia al 6,37 % desde que se completó el proceso de inmunización en estos centros de alojamiento y manutención de mayores.

El cualquier caso, los profesionales del sector avisan del avance de la transmisión vírica en las residencias, pues la incidencia en ellas se ha multiplicado por cuatro en comparación con mediados de febrero, cuando no había concluido la vacunación en esos lugares.

La duda es si tiene que ver con una pérdida de inmunidad o que la vacuna no es tan eficaz con las nuevas variantes de coronavirus, dado que son personas de salud frágil.

RESTRINGIR LAS VISITAS

En España hay unos 5.500 centros residenciales de ancianos (1.435 públicos y 4.100 privados), en los que conviven más de 325.000 usuarios.

Han sido motivo de gran polémica social y política por la falta de atención sanitaria adecuada para estas personas en los momentos más duros de la pandemia. Hasta febrero pasado, murieron en ellas cerca de 30.000 personas, 19.868 con la enfermedad confirmada y 9.914 con síntomas compatibles, según datos oficiales.

Ante el avance del contagio -que en 2021 ha costado la vida de 4.000 residentes- algunas regiones, como Cataluña (noreste), han decido reducir el número de familiares permitidos en las visitas.

El nuevo protocolo de Madrid recomienda evitar las de quienes no estén vacunados, como la mayoría de los menores de edad, y aconseja a los centros contratar únicamente trabajadores vacunados.

En esta línea se sitúan las patronales de las residencias. «Consideramos que todas las personas que vayan a ver a residentes deberían tener esta pauta completa de vacunación, además de extremar todas las medidas» de prevención, indica a EFE Jesús Cubero, secretario general de la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia.

Respecto a la tercera dosis de la vacuna, apunta que «si se aprueba, debería empezarse de nuevo por las residencias de mayores, tanto los profesionales como los residentes deben tener esa prioridad».