Un ambiente colorido y multicultural se vivió anoche en la avenida Huayna Cápac por el desfile de comparsas por el concurso Mascaradas 2020, que es organizado por Amistad Club y la Unión de Periodistas del Azuay (UPA).
Una decena de payasos, vestidos con ternos rojos, camisas grises, guantes blancos y pelucas verdes, encabezó la caminata, que inició en la calle República y se extendió hasta la Calle Larga.
Ellos, acompañados de una banda de pueblo, fueron los encargados de evitar que los espectadores estén sobre la calzada, como una medida de seguridad. Como prevención también se colocaron vallas metálicas.
La primera comparsa en salir fue la del Municipio de Cuenca, con un baile tradicional, en el que participaron también bailarines de Argentina. En esta presentación se combinaron ritmos argentinos y ecuatorianos.
Igualmente estuvo la Universidad del Azuay (UDA) con la comparsa llamada Abya-Yala: Un Mundo Marvelloso, que es una conjugación entre los superhéroes de Marvel y personajes de los pueblos originarios.
Estos últimos representantes de algunos culturas como: Mapuches, Incas, Mayas y los nativos americanos, acompañados de animales míticos como guacamayos, águilas, centauros; entre otros.
Uno de los principales atractivos fue un barco grande que circuló con sus velas desplegadas, y con un juego de luces. Cerca de 400 estudiantes fueron parte de esta presentación.
Un grupo de extranjeros, que se hacen llamar Gringos Locos, nativos de los Estados Unidos (EE.UU.), presentó la comparsa Super Gaseros. Se vistieron como cilindros de gas amarillos. En sus trajes, estaba la frase: Peligro Gas Inflamable.
Sobre escenificaron dos espacios de una casa: cocina y una ducha, para mostrar lo que ocurre cuando se termina el gas. También usaron globos celestes, azules, blancos y violetas.
Un extranjero, con un letrero sobre su cabeza, con la frase Sin Gas, y una capa amarilla, fue el encargado de liderar esta comparsa. Utilizó un pequeño vehículo eléctrico de tres ruedas.
En este concurso también participó el Instituto Superior Tecnológico Sudamericano, con el tema Juguetes de Antaño. Sus estudiantes mujeres se disfrazaron con trajes de muñecas de trapo.
Otros alumnos utilizaron disfraces de soldados de juguete, y también sacaron carros de madera y triciclos confeccionados de manera artesanal, para mostrar los juegos tradicionales.
La familia Vanegas, que es una de las que tradicionalmente participa en este concurso, este año, presentó la comparsa con el tema: Con el Fondo Monetario Internacional nos Vamos al Fondo.
Presentaron un vehículo con algunas frases como: corrupción política, sicariato, racismo, migración, la patria está acabada, arroz verde, desfalcos, femicidios. Esto para mostrar los principales problemas del país.
La Universidad de Cuenca escenificó, como parte de una sátira de la política nacional, el paro de octubre de 2019. Su presentación se llamó: Desde el Páramo, Genios, Malgenios y Algo Más.
Presentaron grandes estructuras con personajes como Pinocho, Caballeros de la Noche, Genio de la Lámpara, entre otros, y algunos frases que se dijeron en estas jornadas de manifestaciones.
Estuvieron unos 400 estudiantes cuyo objetivo fue exhibir una narrativa poética de lo que ha ocurrido en Ecuador y América Latina, y los levantamientos de los pueblos en contra de sus gobernantes.
La cooperativa de Ahorro y Crédito Jardín Azuayo participó con el tema En Mis Tiempos, con el que buscó reconocer a quienes se dedican a los oficios tradicionales de Cuenca.
El Instituto Tecnológico Superior American College presentó: La Venganza de Ledrin Thamos, y la Asociación de Ayuda Humanitaria Cuenca estuvo con La Salud en Tiempos de Huelga.
Asimismo participó la Unidad Educativa Sindicato de Choferes, con el tema Casi me Paro con el Paro; y el Club Amigos Siempre San Blas, con la presentación llamada Que Tiempos Aquellos.
Premiación
El jurado calificador está conformado por integrantes del Amistad Club, UPA y el Municipio de Cuenca. La decisión que tomen es definitiva, dado que tiene el carácter de inapelable.
La premiación se cumplirá en una ceremonia especial inmediatamente después de asignada la transferencia por parte de la municipalidad. En total se reparten 12.800 dólares en premios. (I)
