Miguel “Chibolo” Segura es uno de los ocho refuerzos que esperan triunfar en la temporada 2020 con Deportivo Cuenca. El esmeraldeño de 29 años, 170 cm de estatura y 72 kg de peso, se considera una persona muy creyente. “Yo siempre he dicho y tengo tatuado en mi brazo: con Dios todo es posible. Es un pilar fundamental en mi vida, en mi carrera, porque he pasado por muchas cosas difíciles y él es el único que me ha sacado adelante”.
Por razones personales, que prefiere no detallar, decidió dejar Quito y abordar el Expreso Austral. “Es un equipo muy importante por todo lo que significa para la ciudad y para la hinchada que es muy exigente. A uno como jugador le gusta la presión, que la hinchada esté aquí, para que uno crezca”.
En 2019, entre LigaPro y Copa Ecuador, jugó 29 partidos, marcó dos goles y dio tres asistencias con El Nacional. “Me gusta atacar bastante, pegarle desde afuera, me gusta tratar bien a la pelota, no tirar muchos pelotazos. En El Nacional jugué de volante, vamos a ver acá en qué posición me pone el profe”.
– ¿Por qué chibolo?
De peladito me pusieron así cuando comencé a jugar, creo que porque era muy frentón (sonríe).
– ¿Cómo empezó en el fútbol?
De pequeño siempre jugaba en Esmeraldas. Me acuerdo que a mi mamá cuando me iba a la escuela siempre le dañaba los zapatos porque comenzaba a andar pateando. A los 10 años empecé a jugar cantonales, barriales. Luego unos amigos me llevaron a Lago Agrio (Sucumbíos), al Caribe Junior (2005) y de allí salí a El Nacional (2008).
– ¿En qué posición empezó?
Siempre jugué de volante. El que me hizo lateral fue el profe Jorge Célico -en Universidad Católica (2010-2012)- porque me decía que de atrás tenía más visión de juego. Me hizo jugar también de cinco. Cuando estaba en Deportivo Quevedo (2013-2014) y Fuerza Amarilla (2015-2018) comencé a jugar más de lateral.
– ¿Ha cumplido todos los sueños que se ha trazado en la vida?
El año pasado estuve un poco triste. Por todo el trabajo que venía haciendo, uno siempre anhela salir del país o estar en una selección, pero nada, ahora acá estoy mentalizado en hacer las cosas de la mejor manera y muy pronto, quien quita, pueda ser tomado en cuenta.
– ¿Quiénes son sus referentes?
Mis referentes son Jhon García, Iván Hurtado, Edwin Tenorio. Me hablaban bastante que el fútbol es de constancia, que todos los años hay que jugar, jugar y jugar y siempre me dedico a eso porque creo que para todo hay tiempo. Uno se debe a este deporte y siempre tiene que trabajar al máximo para hacer las cosas bien.
– ¿A qué suele dedicarse en los momentos libres?
Mi tiempo libre siempre le dedico a mi familia, a veces me se ir al gimnasio. Una vez que termino el entrenamiento me se quedar pateando porque me gusta bastante. Como tengo una pelota en mi casa, entonces me veo una canchita y me pongo a patear.
– ¿Su esposa, su hijo cuando vienen?
Cuando termine la pretemporada. Mi hijo se llama Miguel Ángel; mi esposa, Mayra.
– Música, cine, libros ¿qué prefiere?
Me gusta la música, la salsa, claro, la salsa y vallenato, full. Escucho bastante a Elvis Magno, al Grupo Galé. Uno de mis temas favoritos es “Un día después” de Elvis Magno, es una música que me llega.
– ¿Qué tipo de películas son sus favoritas?
Las películas de acción, de comedia. Mi actor favorito es Jean Claude Van Damme. (BST)-(D)
Primer día de concentración
Igual que este jueves, Deportivo Cuenca trabajará en triple jornada este viernes en el cantón Paute. A las 08:00 el plantel asistirá al gimnasio. Después se trasladará al Estadio Eduardo Crespo Malo para desarrollar el entrenamiento físico, a las 09:00, y el entrenamiento técnico, a las 16:30. Los delanteros Jacson Pita y Edison Preciado asisten a las prácticas pero no participan con la misma intensidad que el resto del grupo. El lateral derecho Andy Burbano tampoco trabajó a la par de sus compañeros por una molestia articular que sintió en el entrenamiento del miércoles en Huizhil. (BST)-(D)