El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, designó este viernes mediante un decreto a José Javier de la Gasca López como nuevo secretario Anticorrupción, el tercer responsable en ocupar el cargo desde que se creara la Secretaría a principios 2019.
En el documento se especifica que De la Gasca fue nombrado como nuevo cargo que dirige la Secretaría Anticorrupción a partir de hoy, fecha en la que ha sido emitido el decreto presidencial.
Se trata del tercer secretario de esta entidad que combate y persigue la corrupción en menos de un año desde que el propio Moreno creara el organismo público en febrero de 2019.
En ese entonces el mandatario asignó a Iván Granda, actual ministro de Inclusión Social y Económica, como su representante.
Granda, quien renunció a su cargo en octubre de 2019, fue sucedido en esa responsabilidad por Dora Ordóñez, que duró casi tres meses en el cargo antes de presentar su renuncia el 10 de enero.
La Secretaría Anticorrupción es un órgano adjunto a la Presidencia que se encarga de generar políticas públicas y acciones para facilitar la denuncia de actos de corrupción y, además, coordinar la cooperación entre instituciones de Gobierno, organismos de control y entidades judiciales involucradas en la investigación y sanción de estos crímenes.
Asimismo, este organismo batallaba cómo mejorar la percepción de la ciudadanía sobre la corrupción y el alto grado de impunidad del fenómeno.
Y es que según explicaba a Efe Ordóñez en noviembre pasado, el 44 por ciento de los ciudadanos creen que la corrupción «no importa con tal que exista obra».
La anterior secretaria aseguró, asimismo, que la corrupción en la década de gobierno de Rafael Correa (2007-2017) arroja unas cifras que organismos locales e internacionales estiman entre los 30.000 y 70.000 millones de dólares en perjuicios para el Estado ecuatoriano.
En el último indicador de corrupción para América Latina dado por el Centro de Estudios Latinoamericanos (CESLA), Ecuador tiene un nivel alto de corrupción y una «debilidad extrema» en política anticorrupción. EFE