El sector empresarial ecuatoriano solicitó este lunes al Gobierno liderado por Lenín Moreno mejoras en la competitividad, que incluyan la creación de una agenda «íntegra», previo a la suscripción de un acuerdo comercial con México.
Dicha agenda se debe articular con una política económica con enfoque productivo y armonizar la política comercial con la productiva, indicó la Cámara de Comercio de Quito en un comunicado.
Con ello, se busca mejorar las condiciones estructurales del país para la atracción de inversiones y la generación de empleo, pero, sobre todo, fortalecer al sector productivo de tal forma que pueda enfrentar el desafío de la apertura comercial.
Esto en el marco de una competencia justa «donde prime la igualdad de condiciones de competitividad, respecto de los países competidores», dice el escrito.
En una rueda de prensa, representantes de los principales gremios industriales del país, acompañados por la Cámara de Comercio de Quito, presentaron una carta dirigida al vicepresidente de Ecuador, Otto Sonnenholzner, en la que hacen hincapié en la agenda de competitividad.
David Molina, director ejecutivo de la Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana (CINAE), manifestó que no se oponen a los acuerdos comerciales, pero quieren «condiciones de igualdad para poder competir con estos mercados grandes», dijo.
Y por ello, detalló que la propuesta se basa en tres pedidos específicos, que se cree una agenda comercial que solucione problemas tributarios y le devuelva la competitividad al país.
Además, que se establezcan mesas de trabajo lideradas por el vicepresidente de Ecuador para generar planes de mejora competitiva para los sectores sensibles de los acuerdos comerciales.
Asimismo, proponen la institucionalización de las negociaciones comerciales, fortaleciendo al equipo negociador y con la participación activa del sector privado.
Gustavo Ruiz Paulsen, presidente de la Cámara de la Pequeña y Mediana Empresa de la provincia de Pichincha, enfatizó que el país necesita un cambio estructural para poder competir de forma adecuada con los otras naciones.
«Mientras el Gobierno no defina una política justa, seria y moderna, el país no podrá salir adelante», subrayó.
Para el sector productivo, entre las propuestas prioritarias transversales que mejorarán la competitividad figuran la eliminación del Impuesto a la Salida de Divisas y de los aranceles de materias primas, insumos y bienes de capital.
Además, la reducción del costo de la electricidad para uso industrial, el costo del dinero en cuanto a plazos y tasas, la reforma al régimen aduanero, la reforma laboral, entre otras.
Asimismo, insisten en que el vicepresidente del país intervenga como articulador para que se ejecuten las reformas que mejoren la competitividad, a la par que avanza el proceso de fijar acuerdos comerciales con México.
El año pasado delegaciones de Ecuador y México fijaron los términos de referencia para la negociación de un acuerdo bilateral de libre comercio, requisito imprescindible para la plena inclusión del país andino en la Alianza del Pacífico.
México es uno de los más importantes socios comerciales y de inversión de Ecuador, con un intercambio que ronda los 900 millones de dólares, de los cuales 750 millones corresponden a exportaciones mexicanas al mercado ecuatoriano.
Además, según datos del Ministerio ecuatoriano de Comercio Exterior, entre 2008 y 2017 México invirtió cerca de 1.500 millones de dólares en Ecuador, lo que representó el 21 % de la inversión total que recibió el país suramericano en ese período. EFE
