El Gobierno Provincial del Cañar se involucra con un proyecto integral para el segundo semestre del año.
Parte de un muro de los vestigios derrumbado, señalización deteriorada, maleza y falta de guardianía, preocupan a las autoridades parroquiales y a colectivos culturales de Azogues, quienes exigen una intervención integral del Complejo Arqueológico Cojitambo.
Ayer, se recorrió el sitio para evidenciar los reclamos dirigidos, especialmente al Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) responsable del manejo de la red de sitios arqueológicos y paleontológicos estipulado en la Ley Orgánica de Cultura.
José Bravo, presidente de la Junta Parroquial de Cojitambo, dijo que están preocupados porque no cuentan con ningún documento o autorización del INPC para mejorar el estado del complejo. Aseguró que han conversado con el Municipio de Azogues, pero no con el INPC con el que aspiran un acercamiento para coordinar acciones.
Bravo recalcó que en el caso del muro colapso en diciembre del año anterior como resultado de los fuertes aguaceros, “ si no se interviene ahora, se derrumbará mucho más”. Recalcó que Cojitambo es uno de los espacios turísticos más importantes del cantón y la provincia, donde hace falta un plan de manejo integral.
De su lado, Eduardo Crespo, representante del colectivo Cuchara de Palo y expresidente de la Casa de la Cultura Núcleo del Cañar, recordó que en sus dos períodos al frente de la institución sumado al período del también expresidente Fernando Crespo “institucionalmente se intervino el complejo restaurándolo en su totalidad. Esto hace aproximadamente 16 años”.
Crespo dijo que en esas administraciones siempre en coordinación con la Junta Parroquial se efectuaban mantenimientos permanentes incluso existía guardianía en el sitio, y con el Gobierno Provincial de ese entonces, se construyeron los primeros refugios turísticos. Posteriormente, las leyes del país cambiaron lo que hizo que el INPC se encargue de los sitios arqueológicos.
“Ahora existe una omisión plurinstitucional sobre la preservación, y más todavía, sobre el manejo del sitio que debe ser totalmente integral, pero fundamentalmente promoviendo el apropiamiento de la comunidad”, señaló.
Labor
Ante esto, Patricio Zamora, director zonal del INPC, aseguró que en los últimos 3 años se han efectuado trabajos de mitigación en el sitio con el equipo técnico de arqueología y conservación del INPC y con el Instituto Técnico Superior Andrés F. Córdova. Recalcó que los inconvenientes en el muro citado es un hecho reciente “en una sección que no va más allá de 1, 50 metros”.
Zamora indicó que en conjunto con el Municipio de Azogues y el Instituto Andrés F. Córdova se trabajará en la recuperación del muro. “Aspiramos en 15 días iniciar con los trabajos, solo esperamos que pase la temporada invernal”. De la misma manera, se prevé la limpieza del sitio con el apoyo municipal.
Adelantó que para el segundo semestre del año, se iniciará con el Gobierno Provincial del Cañar el proyecto de conservación y restauración completa del sitio arqueológico, con una inversión de la Prefectura de cerca de 1.000.000 de dólares.
Aseguró que dicho proyecto cumple con todas las especificaciones que exige el INPC, “nosotros emitimos ya en tres ocasiones recomendaciones y complementaciones de esos estudios”. Dijo que el Municipio de Azogues a través de la Comisión de Patrimonio se encargan de la aprobación de los temas administrativos.
Finalizó expresando que la competencia es del INPC, pero se conversará con el presidente de la Junta Parroquial de Cojitambo para involucrarlo en el tema, incluso se organizará una reunión para coordinar trabajos, “pero todo lo que se ha hecho por el momento es directamente con el Municipio y Gobierno Provincial”. (BPR)-(I)
EN DETALLE
Para el proyecto de la Prefectura y INPC, el Municipio de Azogues expropiará un terreno que servirá para la construcción del museo en sitio.
VINCULADA
Proyecto del Gobierno Provincial
Bayron Pacheco, prefecto del Cañar, detalló que el proyecto que maneja la institución consiste que en la cima del Cojitambo se construirá un balcón tipo mirador con un piso de cristal para una capacidad de 50 personas para promover el lugar como un sitio arqueológico y un destino turístico.
Pacheco expresó que también se incluye un museo, caminería, corredores, una plaza a la que se denominará de “El Sol” que servirá como un complemento para desarrollar actividades culturales y artísticas. “Nuestra administración provincial tiene un modelo de gestión futurista que piensa en grande, este es un proyecto emblemático”.
El proyecto tiene un costo de aproximadamente 1.000.000 de dólares, de los cuales, la Empresa Pública Petroecuador por temas de compensación por el Poliducto Pascuales-Cuenca financiará cerca de 500.000 dólares. La obra se ejecutará por la empresa de construcciones de la Prefectura con asesoramiento de expertos en temas arqueológicos.
La autoridad indicó que para finales de marzo se prevé contar con los estudios necesarios, los que se presentarán a Petroecuador para finiquitar la entrega de los recursos económicos. “De nuestro lado, tenemos lista la partida presupuestaria, debidamente certificada, los recursos están para el proyecto”.
