Rodeado de marionetas, caricaturas y recuerdos que aún se mantienen frescos, encontramos a Francisco Cisneros, iniciador de las artes marciales en Cuenca.
“Pancho”, como es conocido entre familiares y amigos, comparte a Diario El Mercurio que continúa realizando las actividades que más le gusta. “Definitivamente debemos comprender que el deporte y la ocupación sana es la base de la salud, y es por eso que semanalmente practico las artes marciales con un grupo de 10 amigos profesionales, entre abogados, médicos; el resto del tiempo lo ocupo en la vida artística, soy dibujante y titiritero…”.
La ex gloria del deporte azuayo en la actualidad promociona su teatro de marionetas en redes sociales. “En mi Facebook: Pancho Cisneros, tengo un espacio artístico, cultural y deportivo, todos los jueves, recién realicé mi publicación 149…Son actividades que se constituyen en una terapia para vivir una vida relativamente saludable”.
Mirando a una fotografía del recuerdo evoca que inició en las artes marciales cuando tenía 19 años. “Actualmente paso de los 70”, sostiene entre risas, sin precisar su edad.
“Recuerdo que en la época de colegio (estudió en el Manuel J. Calle) un compañero depositó en mis manos un libro que decía jiu jitsu, en ese momento prácticamente nace mi afición. Veíamos las diferentes técnicas en las fotografías y subíamos a los llanos de Cristo Rey para ponerlas en práctica. Salíamos lesionados, heridos, pero muy contentos…”.
Posteriormente empezó a impartir sus conocimientos en el gimnasio “Jigoro Kano”, creado en 1963, actualmente llamado “Korea”. “Para mí es un orgullo que el 99% de maestros de las artes marciales han sido mis alumnos, entre ellos: Patricio Reinoso, Marco Chango, Eddy Guerrero, Alfonso Jiménez…”.
A este personaje cuencano se le puede calificar como multifacético, ya que antes de enseñar karate, taekwondo y hapkido, Cisneros introdujo la lucha libre en Cuenca, previa practica de la lucha olímpica en Guayaquil.
También funda el primer club de alas delta en la ciudad, allá por el año de 1979, y además fue amaestrador de perros después de hacer cursos con la policía y ejército colombiano. “Llegué inclusive a tener un criadero de perros pastor alemán”, acotó.
“Paralelamente practiqué el ecuavoley, otro deporte que me apasiona. Tuve que dejarlo por una lesión en mi hombro (rotura de ligamentos)”.
Cisneros, quien fue caricaturista de Diario El Mercurio, es autor del libro titulado “Pancho y su humorismo gráfico de la vida real”, el mismo que tiene 200 caricaturas y fue publicado en el 2005.
EL DATO
Pancho Cisneros, cinta negra en judo, taekwondo y hapkido que enseñó sus técnicas en los cuarteles de policía, indicó que la elaboración de marionetas es muy laborioso. Le puede tomar de uno a dos meses. Tiene 200 marionetas en su colección.
José Mosquera Baca
@jmosquera1982