La casa María Astudillo se activa con veladas artísticas
Una velada artística le dio vida a la casa museo María Astudillo Montesinos, una edificación de tres siglos bastante singular en Cuenca. Este lugar conserva un estilo marcado por la tradición del siglo XIX.
Ese atractivo llamó la atención de Jhonny Bravo, un músico cuencano que trabajó una propuesta de mediación turístico-cultural para esta casa, que consiste en ofrecer a los visitantes una noche de arte (música, danza, teatro), historia y gastronomía local.
La noche del sábado, con la presencia de un grupo de no más de 30 personas, la velada inició con una interpretación de canto lírico. El acto fue en el salón central, bajo la luz de una lámpara del siglo XIX. Al mismo tiempo, los presentes podían admirar la decoración del espacio: las paredes recubiertas de un papel tapiz dorado, el piso pintado con flores rojas, candelabros, decenas de fotos y una pintura en la que está Florencia Astudillo, quien fue “la mujer más rica de Cuenca en la primera mitad del siglo XX” y su propietaria.
Todo eso cuenta Lucía Astudillo, una de las coordinadoras de la casa museo, en el primer receso del acto musical. Para la segunda parte, las luces de la lámpara se apagan y la sala queda iluminada por unas pocas velas. La intención era recordar la época cuando la luz eléctrica aún no llegaba a Cuenca. La segunda parte fue una interpretación de tango y música nacional.
Al final, los visitantes recorrieron la casa-museo. La propuesta es que las veladas artísticas se desarrollen los días sábado y que sean parte de paquetes turísticos que ofrezcan las operadoras de viaje. (JBA)-(I)