Pasteurizadora Quito, aliada completa en la alimentación de las familias ecuatorianas, realizó la adecuación de un lactario en su planta principal, en Quito.
La sala cuenta con toda la comodidad, privacidad y equipamiento necesario para permitir a cada madre de familia dar de lactar a su bebé. Dispone de una camilla, sillón, mesa auxiliar, refrigeradora, esterilizador y baño completo para que las madres puedan extraer su leche en las horas laborales y almacenarlas de manera correcta hasta su salida. Además, está situado junto al consultorio médico de la empresa, con el fin de que las madres cuenten con el apoyo de una doctora y personal de enfermería.
“Es nuestra prioridad que la lactancia materna se desarrolle sin restricción durante el primer año de vida de un lactante. Comprendemos, además, que es un aspecto importante tanto para el desarrollo del vínculo emocional entre la madre y su bebé recién nacido, como lo es para el mejoramiento productivo de nuestras colaboradoras al brindar un espacio propio para ellas restando una preocupación en su día a día. Adecuamos una sala que cumple con lo requerido para alcanzar nuestro objetivo de brindar todas las facilidades a nuestras mamás, del cual actualmente dos colaboradoras hacen uso, lo que beneficia no solo a ellas sino también a sus pequeños debido a la gran importancia de la leche materna para su crecimiento y desarrollo psicomotriz e intelectual. El mantener su banco de leche y llevarse a casa para alimentarlos durante esta etapa es crucial para nosotros”, señaló Gabriela Lunavictoria, Gerente de Marketing de Pasteurizadora Quito.
Mediante esta iniciativa, la empresa cumplió con la disposición del Acuerdo Interministerial No.003, suscrito entre los Ministerios del Trabajo y de Salud Pública. A su vez, ratificó su compromiso con el bienestar de su equipo de trabajo. El protocolo para el uso de la sala determina 20 minutos cada dos horas para que las madres puedan acudir a la misma.