VIALIDAD
La angustia por la incomunicación y la serie de complicaciones que genera cada año el invierno para el tránsito al no existir puentes, ha hecho que los pobladores de la zona baja de Molleturo, levanten su voz pidiendo atención, ante la falta de puentes en la vía Tamarindo-Estero Piedras-Putucay, sin que hasta el momento haya respuesta oportuna de las autoridades, en este caso de la Prefectura, que tiene la competencia.
Ya un grupo de pobladores expresaron su preocupación pública en noviembre pasado, e hicieron un llamado a las autoridades para que se de continuidad a la construcción de los tres puentes planificados en la administración anterior, de los cuales ya se iniciaron los trabajos en dos, el clamor fue que se apresure la ejecución de los proyectos antes de que llegue el invierno.
“Por Dios, ayúdenos a poner en evidencia cómo estamos viviendo acá en Estero Piedras, dice un mensaje enviado por Carmen Tacuri, moradora de esta comunidad, una de las 25 que integran la zona baja de Molleturo, que está en problemas ante la temporada invernal.
Y es que el pedido no ha tenido respuesta aún. Ayer nuevamente los habitantes expusieron esta triste realidad que implica inasistencia de niños a clases porque no pueden pasar los vehículos, y el riesgo al que se exponen quienes tratan de cruzar a bordo de motos.
En radio La Voz del Tomebamba, con voz desesperada, mencionó este miércoles que dejarían el último oficio al prefecto Yaku Pérez, insistiendo en que se construyan los tres puentes pendientes y cuyas crecentadas impidieron ayer en la mañana el tránsito vehicular. Explicó que es el último pedido por escrito porque en adelante realizarán movilizaciones con moradores de las 25 comunidades, para reclamar sus derechos.
Es de mencionar que los trabajos iniciaron en base al convenio de pago suscrito el 29 de mayo de 2018, entre la Prefectura del Azuay y el Gobierno Nacional, para cancelar la deuda por la venta de las acciones de las empresas eléctricas, en el que se definió un plan vial, que incluía la construcción de los tres puentes reclamados, esto es: puente Saca Calzones; puente Limones; y puente Tres Ranchos.
Se contrataron las obras, la construcción inició en el estero Limones, y luego en el estero Tres Ranchos; así, los dos cuentan con las bases, pero las obras fueron suspendidas desde finales de la administración anterior hasta la fecha.
Según versiones de moradores como Flavio Gutama y Alejandro Arévalo, las obras no avanzan porque según la nueva administración, las bases no están bien hechas, ellos exigen una solución urgente.
Prefectura tiene plan para solución
El director de Obras Públicas de la Prefectura del Azuay, José Brito informó ayer, que hubo problemas en el contrato y finalmente este martes se pudo concretar la terminación por mutuo acuerdo.
Ahora cabe la aplicación de un plan para una intervención rápida, que ya ha sido diseñado, la cual tendría dos caminos, una mediante un contrato de menor cuantía, o a través de la declaratoria de emergencia, para simplificar el proceso de contratación.
Hay que superar un tema técnico en el asunto de los estribos porque aparentemente no estuvo actualizado el diseño; hemos conversado con el prefecto Yaku Pérez, se adoptará la vía más rápida y se terminarán esos dos puentes. Una vez que se retomen los trabajos, tomará unos 60 días dejarlos listos, explicó Brito.