El precio del petróleo de Texas (WTI) para entrega en abril abrió este martes con un importante ascenso del 8,22 % en lo que se considera un rebote tras el desplome del 24 % del lunes, originado por la guerra de precios entre Arabia Saudí y Rusia después de que la OPEP no consiguiese acordar con Moscú un nuevo recorte en la producción por el coronavirus.
A las 09.15 hora local (13.15 GMT), el barril cotizaba a 33,69 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York tras ganar 2,56 dólares, sólo una tercera parte de lo perdido ayer.
Los precios del petróleo subieron así de forma importante este martes después de que informes de que las conversaciones en curso entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, conocidos como OPEP +, siguen siendo posibles, según los analistas.
En declaraciones a los periodistas el martes, el ministro de Energía ruso, Alexander Novak, dijo que su país no había descartado medidas con la OPEP para estabilizar los mercados petroleros, según informa la cadena especializada CNBC, que apuntó que el Ministerio de Energía de Rusia propuso mantener una reunión con las compañías petroleras rusas el miércoles.
Los precios se recuperan así parcialmente después de la caída del lunes, que vio al WTI y al Brent caer un 24 % en su peor desplome desde 1991, en la Guerra del Golfo.
La petrolera saudí Aramco, la empresa con más beneficios del mundo, cerró la jornada del martes con la mayor subida desde su salida en diciembre a bolsa, con un ascenso del 9,8 % del precio de sus acciones respecto al día anterior, después de anunciar un aumento del 2,5 % de la producción a partir del 1 de abril.
Aramco, que esta semana registró por primera vez una caída del precio de sus acciones por debajo del valor de salida a bolsa (9,39 dólares), cerró este martes con un precio de 8,3 dólares, después de que la empresa anunciara un aumento de la producción de 300.000 barriles diarios. EFE