El Frente Unitario de Trabajadores (FUT) propuso este miércoles al Gobierno de Lenín Moreno que declare una moratoria en la devolución de la deuda externa, en lugar del conjunto de medidas económicas que ha planteado para paliar el impacto de la crisis del coronavirus en Ecuador.
Mesías Tatamuez, presidente de la que es la principal central obrera del país, expresó en una rueda de prensa su rechazo a las medidas anunciadas por el Ejecutivo el martes y abogó por la moratoria de la deuda.
Todo ello al considerar que, así, se podría lograr ingresos para destinarlos a sectores como «la educación, salud, empleo y demás necesidades del pueblo ecuatoriano».
Asimismo, José Villavicencio, presidente de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE), afirmó por otro lado que es «momento de cobrar los más de 4.000 millones de dólares a las grandes empresas deudoras».
«Hasta ahora, no se les ha cobrado un centavo (de lo) que hace tres años nos prometieron. Queremos que se cobre a los evasores», manifestó el líder sindical.
Y aludió a «revisar los contratos petroleros y de las empresas telefónicas» de las que dijo: «Se llevan 3.000 millones de dólares de los ecuatorianos» y si «solo nos dejaran el 50 por ciento, el Estado tendría ingresos de 1.500 millones de dólares».
El presidente ecuatoriano anunció el martes un paquete de medidas de ahorro y fiscales para conseguir más de 2.500 millones de dólares que faltarán en el presupuesto debido a la caída del precio del petróleo y el coronavirus.
Entre ellas, destacan el aporte a las arcas públicas de un porcentaje del salario de los servidores públicos, eliminación de instituciones públicas y mayores recortes en el gasto del Estado.
En 2019, Ecuador pactó con varios organismos multilaterales una financiación por 10.200 millones de dólares, que no serán suficientes para tapar los agujeros presupuestarios.
A las dificultades se suma el vencimiento a partir de 2022 de una serie de emisiones de deuda que pondrá en aprietos a la economía nacional.
Villavicencio también planteó, como alternativas a las nuevas medidas, el cobro de más impuestos a 270 grandes grupos económicos del país, lo que daría al estado «1.200 millones en ingresos» adicionales.
Los trabajadores no han descartado emprender acciones -que no especificaron- en caso de que el Ejecutivo decida nuevamente eliminar los subsidios a los combustibles, que en octubre pasado desencadenó una masiva protesta en el país hasta que Moreno derogó el decreto.
Por su parte, la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que encabezó esas protestas, ha advertido de que «no será cómplice de otro paquetazo» y que se encuentra en alerta ante la implementación de nuevas medidas económicas. EFE