Había escuchado las promesas de quienes supuestamente eran sus líderes: obras para la comunidad, trabajos para mejorar la vida de las personas. Pero lo dicho había quedado solo en las palabras. Entonces, Óscar Cochancela no lo pensó mucho.
Hasta hace un año estaba estudiando en la Universidad del Azuay para convertirse en abogado, sin embargo, la decisión estaba tomada: quiso ser una opción para convertirse en el líder de la comunidad en la que había crecido.
Óscar habló con su familia. Les explicó que quería ayudar a su comunidad ─El Recreo─ siendo su presidente. El único inconveniente estaba en dejar los estudios porque requeriría tiempo para poder gestionar los trabajos planteados.
Al principio su mamá se renegó. Cómo podía retirarse de la universidad, le dijo. Después ella le condicionó: aceptaba la decisión de Óscar, siempre y cuando, luego de terminar su trabajo, retome las clases de Derecho.
“Cuando tuve el apoyo conversé con la comunidad. Me presenté, y la gente me apoyó. Dos personas más también buscaron ser elegidas, pero la gente decía apoyemos al joven, y me apoyaron y fui elegido”, dice Óscar.
La principal motivación de Óscar era contar con una carretera que una la vía Cuenca-Girón-Pasaje, desde Zhucay, con su comunidad, ubicada a 20 minutos en vehículo desde Carmen de Guzho. Aunque está relativamente cerca de la ciudad, se complica el transporte de la población por una vía de tierra.
Al iniciar su mandato se puso a trabajar, y con la unión de la comunidad se abrió gran parte de la vía, no obstante hubo un problema con un terreno. La situación han puesto en conocimiento de funcionarios del Municipio de Cuenca para que se pueda resolver y concluir con una obra calificada como emergente.
Mientras tanto, el joven líder gestionó para que se colocarán lámparas públicas. Hasta enero en la comunidad solo habían cuatro, pero desde hace un mes ya se cuentan con un poco más de sesenta. Aquello es considerado como un logro para una población conformada por 120 personas.
“He visitado algunas comunidades y me han dicho que me postule para ser presidente de la junta parroquial, pero yo no quiero quemarme. Yo no soy político, yo solo quiero ayudar a la gente porque vivimos la misma realidad, y siempre queremos mejorar”, dice Óscar.
Al joven líder le quedan nueve meses de mandato, y en ese tiempo tiene la esperanza de que la vía sea habilitada para ayudar a su gente. Terminado ello retornará para culminar sus estudios y buscará ayudar a su comunidad desde otros lugares. (AWM)-(I)
El Recreo
La comunidad El Recreo, a la cual representa Óscar, pertenece a la parroquia rural Turi. Esta se encuentra a veinte minutos, en carro, de la ciudad de Cuenca. En la comunidad viven 120 personas, entre niños y adultos.