Nueva York, 28 mar (EFE).- Naciones Unidas entregó este sábado a la ciudad de Nueva York, donde tiene su sede central, una donación de 250.000 mascarillas para hacer frente a la expansión del coronavirus.
Las mascarillas irán destinadas a los profesionales médicos de la Gran Manzana, que han «estado trabajando con valor, de forma altruista y sin descanso en respuesta al avance del COVID-19», explicó el jefe de la organización, António Guterres, que confió en que estos materiales tengan «algún pequeño papel para salvar vidas».
«Hablamos con una voz para expresar nuestro apoyo decidido a esta gran ciudad y a sus orgullosos habitantes. Para nosotros, Nueva York no es sólo nuestro hogar o la sede de la ONU, es una vibrante capital internacional en la que el mundo se comunica, debate, comercia y prospera», dijo Guterres en un comunicado.
«En nombre de la comunidad de la ONU y el cuerpo diplomático, esperamos sinceramente que esta modesta donación haga una diferencia», añadió.
El alcalde de la Gran Manzana, Bill de Blasio, se desplazó a la sede de Naciones Unidas para supervisar la recepción del cargamento, según informó su oficina.
«Agradezco a Naciones Unidas por su donación tan necesaria. Los neoyorquinos y la comunidad internacional estamos juntos en esta lucha», dijo De Blasio, que recordó que la ciudad es el epicentro de la pandemia en Estados Unidos, con más de 29.000 casos confirmados y más de 500 fallecidos.
Las autoridades locales han pedido donaciones de materiales para proteger a los sanitarios, ante la expectativa de que las reservas de los hospitales sean insuficientes muy pronto.
El viernes, el alcalde había advertido de que la ciudad tiene los equipos necesarios para trabajar sólo hasta el 5 de abril y subrayó además la importancia de obtener más suministros clave como ventiladores, que requieren muchos pacientes graves de COVID-19. EFE