La naturaleza se recupera en cuarentena
Según las mediciones de las empresas municipales, la calidad y cantidad de agua en las fuentes de abastecimiento de la ciudad se incrementa y el aire es más puro durante esta cuarentena, un tiempo de aislamiento que da un respiro a la naturaleza.
El avistamiento de un oso de anteojos cerca de la carretera que une a Gualaceo con la provincia de Morona Santiago da cuenta de que la fauna se mueve con mayor libertad, algo similar pasa en Quimsacocha y el Parque Nacional Cajas, señalan los guardaparques de estas zonas.
El biólogo José Cáceres indica que el planeta tiene un alto nivel de resiliencia, que es la capacidad de adaptarse a los cambios provocados por la mano del hombre, algo que se nota “a simple vista” en los espacios verdes de la ciudad.
Si bien es poco tiempo para ver resultados permanentes, la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (ETAPA) alista estudios para medir los cambios generados por la cuarentena y establecer políticas que ayuden a mejorar las condiciones ambientales de Cuenca.
Aire
La Empresa de Movilidad, Tránsito y Transporte (EMOV) mide la calidad del aire de forma permanente con la colaboración de la Universidad del Azuay a través de su sistema de monitoreo.
En los últimos 15 días, a excepción del 25 de marzo cuando se registró presencia de ceniza del volcán Sangay, la calidad del aire en Cuenca ha sido óptima.
De acuerdo con las mediciones, las partículas finas en el ambiente se redujeron a la mitad, el monóxido de carbono pasó de un promedio de 140 a 7, el ozono de 45 a 12 y la presencia de azufre y dióxido de nitrógeno es hoy en día prácticamente nulo.
Cáceres explica que esta mejora en la calidad del aire se debe a la reducción en la circulación de vehículos, que ha bajado en al menos un 90 % en Cuenca y al descenso de actividades industriales.
El subgerente ambiental de ETAPA, Javier Crespo, indica que en el Parque Nacional Cajas el flujo vehicular se ha reducido unas 10 veces, lo que hace que uno de los principales pulmones de Cuenca mejore sustancialmente su salud.
Agua
A excepción del último sábado, cuando una creciente repentina de los ríos trajo turbiedad por la presencia de lodo y materia vegetal, el agua de Cuenca también ha mejorado, “tanto en cantidad como en calidad” indica Crespo.
Cáceres explica que, a más de la reducción de gases contaminantes en el Parque Nacional Cajas algo que mejora la salud de las fuentes de agua, la paralización de actividades comerciales, industriales y agrícolas a gran escala ha reducido la turbiedad.
Esto, según Crespo, no solo brinda una mejor agua para la ciudad, sino que reduce costos en la purificación del líquido vital, lo que contribuye a la economía del gobierno local.
Fauna
Cáceres explica que mamíferos, aves, anfibios y reptiles que son sensibles ante los cambios van a cambiar sus comportamientos con la reducción de vehículos y visitantes a las áreas protegidas.
Guardaparques de Quimsacocha y el Parque Nacional Cajas indican que han podido ver venados, grandes mamíferos y aves exóticas en zonas donde algunos tipos de especies no se habían divisado hace unos 25 años.
Los biólogos del Ministerio del Ambiente y ETAPA esperan que este compás de espera permita que la ciudadanía tome conciencia de su impacto en la naturaleza y tras el aislamiento tenga un comportamiento que permita la sostenibilidad ambiental.
De acuerdo con Cáceres la reducción del tráfico y de la presencia de personas en el Cajas ha hecho que los animales vayan recuperando el espacio que naturalmente les pertenece y que la cuarentena les ha devuelto temporalmente. (JMM) (I)