La Cámara de Transporte de Cuenca (CTC), que agrupa a los 475 buses urbanos que circulan en esta ciudad, hace un pedido urgente al Gobierno Nacional por esta emergencia sanitaria por el coronavirus o CoVid19.
Y es que la condición en la que se encuentra esta organización es diferente a la de otros gremios del transporte similares en el país, pues tiene una deuda de cerca de 60 millones de dólares con la banca privada.
Esto producto de préstamos que pidieron sus socios para renovar toda la flota vehicular y así cumplir con una exigencia dispuesta por el Concejo Cantonal de Cuenca como condición para el ajuste de los pasajes de 25 a 31 centavos de dólar.
Manolo Solís, presidente de la CTC, indicó que han remitido una carta a Lenín Moreno, presidente del Ecuador, para que organismo estatales les otorguen créditos a largo plazo y comenzar a pagar a los bancos desde enero del 2021.
Desde el 17 de marzo la CTC tuvo que suspender su servicio por una disposición del Comité de Operaciones Emergentes (COE) de Cuenca, como una medida para prevenir contagios por coronavirus. Esto ha generado graves pérdidas.
Solís advirtió que de no recibir el apoyo estatal están en riesgo de quebrar y que las unidades sean embargadas, pues no están en condiciones de cubrir las deudas porque no podrán volver a trabajar en las mismas condiciones de antes.
Esto porque el COE nacional resolvió que cuando se reinicie la operación de buses cada unidad podrá ocupar máximo un 30% de su capacidad, que en la práctica representa un pasajero en dos asientos, también solo con el 50% de la flota.
Pero además estima que el número de usuarios bajará considerablemente por la suspensión de clases y por el teletrabajo, que implica que una parte de los trabajadores no tendrá que salir de sus casas.
En la temporada escolar, de lunes a viernes, la CTC moviliza en promedio a 363.892 personas por día. Y los fines de semana 199.801. Cuando no hay clases en los días ordinarios lleva a 303.391 diarios, y el fin de semana 174.022.
Rubén Calle, asesor legal, de la CTC, señaló que aún cuando se reinicie el trabajo no se podrán pagar los créditos y considera que urge la gestión del Municipio de Cuenca ante los entes estatales nacionales.
Calle señaló que el 75% de la población en Cuenca se moviliza en los buses y al paralizarse este servicio por falta de dinero, esto provocará un grave problema para la ciudad e incluso para la provincia de Azuay.
Solicitó al Concejo Cantonal de Cuenca que se conforme una mesa técnica para definir de forma conjunta con la CTC un protocolo para reestablecer el servicio que además de la parte sanitaria contemple lo económico.
Recordó que legalmente es deber de las autoridades locales y nacionales garantizar que haya transporte público. Asimismo destacó que es urgente asegurar que no se pierdan más fuentes de empleo. (CSM)-(I)
ASAMBLEA NACIONAL
Fafo Gavilánez, asambleísta, remitió un pedido a Cesar Litardo, presidente de la Asamblea Nacional, para que se incluyan algunas propuestas en la Ley Orgánica para el Ordenamiento de las Finanzas Públicas, que se trata actualmente.
Uno de los planteamiento del legislador es que los municipios paguen las obligaciones pendientes que tienen con los transportistas. En el caso de Cuenca el municipio mantiene una deuda con la Cámara de Transporte de Cuenca (CTC).
Esto por dos subsidios: el primero representa un monto es de 1.462.839 dólares y el segundo de 598.500. Este último está bajo un análisis de la Contraloría General del Estado (CGE).
La CTC ha solicitado al cabildo el apoyo para cubrir los cerca de 40.000 dólares por mes que representa la desinfección diaria de los 475 buses.