Redacción El Mercurio Web
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La publicación especializada Bloomberg y los analistas Andrés Chiriboga y Andrés Arauz vienen haciendo un seguimiento a detalle del pago de la deuda externa en el Ecuador y en especial en medio de la pandemia. Ellos han concluido que aparte de los USD 342 millones pagados en marzo a los tenedores de bonos recientemente en abril se pagaron USD 865 millones de capital y USD 71 millones en intereses y comisiones por concepto de deuda externa a Goldman Sachs y Credit Suisse.
Ahora bien, ¿a qué se debe el pago de esa importante cifra de dinero en un momento como este? La respuesta sería que se trata del resultado de una apuesta especulativa que tomó el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, en la búsqueda de liquidez, pero que lamentablemente perdió.
¿CÓMO FUNCIONA LA APUESTA?
La lógica de este tipo de operaciones consiste en que el Gobierno presenta un papel, en este caso bonos de deuda del Gobierno Ecuatoriano; a cambio de eso recibe un préstamo y los bonos quedan como garantía.
Todo con una condición: si el valor de los bonos que están puestos en garantía sube, los acreedores tienen que darle un poco más de dinero al Ecuador. Y si es que bajan el Ecuador tiene que darle más dinero a sus acreedores fuera del capital prestado.
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En 2018 el Gobierno recibió USD 500 millones de Goldman Sachs y USD 500 de Credit Suisse, o sea USD 1.000 millones en total.
En 2019 las condiciones se dieron de tal forma que bajó el valor de los bonos nacionales y el Ecuador tuvo que enviarle a Wall Street poco más de USD 400 millones; sin embargo, en diciembre se restablecieron los precios y se recuperó el dinero.
En febrero y en marzo de 2020, el valor de los bonos llegó casi al piso: a 30 centavos por dólar, y el Ecuador tuvo que entregar más de USD 700 millones de dólares a los dos bancos de Wall Street, perdiendo la apuesta especulativa en el peor momento posible.
LA ÚLTIMA DECISIÓN
En abril de 2020, Martínez decide no seguir jugando un juego imposible de ganar, y evitar futuras críticas y presiones, decidió entonces prepagar el préstamo inicial de los USD 1.000 millones y esto implicó una nueva salida de divisas en un escenario de retrasos e impago a servidores públicos, desinversión en salud, entre otras calamidades.
Es bueno decir, que al haber prepagado esa cifra se recupera una parte del dinero, (colaterales en efectivo que pagó en febrero y marzo), pero no se sabe ni en qué proporción, ni cuánto, ni tampoco la penalidad correspondiente.
EL MEOLLO
Lo clave del asunto es que se decidió tomar apuestas especulativas para conseguir liquidez, estas apuestas se perdieron, y se decidió prepagar USD 936 millones para no seguir jugando y perdiendo, la apuesta le costaría, en liquidez, al país aproximadamente USD 700 millones.
Mientras tanto, el Ecuador estaría en el antepenúltimo puesto en gasto fiscal asignado a atender la emergencia sanitaria, según Columbia University, solo superando a Nicaragua y Costa Rica. En el contexto queda registrado que se destinaron USD 936 millones para prepagar una deuda en medio de los atrasos de pagos a los maestros, servidores públicos, seguridad social, proveedores y gobiernos locales.
Fuente: Fuente: Elgin, Columbia University; Basbug, Sungkyunkwan University; Yalaman, Eskişehir Osmangazi University.
LA CARTA DE MARTÍNEZ
Lamentablemente Diario El Mercurio no tuvo acceso al ministro Richard Martínez para contar con su opinión en este texto, aunque no estaría muy lejos de la realidad la especulación de que el funcionario tomó la apuesta basado en varias condiciones.
Unas de ellas es mantener el valor de los bonos bajo la lógica de seguir trabajando de la mano del FMI, reiterándoles su empeño en pasar leyes que creen el ambiente recomendado por ese organismo. Por otro lado, entendiendo que los precios del petróleo seguirían en un lugar menos dramático para el fin de la apuesta. No obstante, las condiciones cambiaron.
Mic. Antonio Valdez