El Gobierno de Perú declaró de interés nacional el oxígeno medicinal para garantizar su abastecimiento ante la gran demanda por el COVID-19, con 183.198 casos acumulados a nivel nacional y 5.031 muertes, lo que ha provocado escasez y un incremento de precios de hasta diez veces su valor normal.
La medida de urgencia se dio después de que esta semana se presentaron largas filas de familiares de enfermos con el coronavirus con cilindros de oxígeno a cuestas, en una desesperada búsqueda para recargarlos en establecimientos que les cobraron considerables sobreprecios, como pudo comprobar Efe.
El precio de los cilindros de oxígeno de 10 metros cúbicos, cuya duración es de unas 24 horas, ha llegado hasta los 6.000 soles (1.750 dólares) y las recargas a 500 soles (145 dólares), a razón de 50 soles (15,5 dólares) por metro cúbico, cuando su valor normal es de unos 15 soles (4,37 dólares).
«Vemos a especuladores tratando de aprovecharse y poner en riesgo la vida del prójimo. Eso no lo vamos a permitir», aseguró el presidente de Perú, Martín Vizcarra, en una conferencia televisada.
«Con el oxígeno está ocurriendo lo mismo que ha ocurrido con otros equipos y bienes necesarios para combatir esta enfermedad. Siempre existe gente sin escrúpulos que trata de aprovecharse de esta enfermedad para sacar un margen de utilidad extraordinario», lamentó el gobernante.
COMPRA URGENTE DE OXÍGENO
El decreto que declara al oxígeno como bien estratégico contempla una compra de 84 millones de soles (25,4 millones de dólares) para atender la alta demanda, que se ha incrementado en un 40 % durante este emergencia, según reconoció la pasada semana el primer ministro, Vicente Zeballos.
También se destinarán 11 millones de soles (3,2 millones de dólares) para redes de distribución que faciliten el acceso del oxígeno a los pacientes de COVID-19 hospitalizados.
Asimismo, el Estado peruano comprará 1.200 concentradores de oxígeno como parte de una partida de 88 millones de soles (25,6 millones de dólares) para atender a la población indígena.
«Los indígenas no han tenido la atención que debían», reconoció Vizcarra.
El decreto también dará prioridad a la producción de oxígeno medicinal sobre el oxígeno industrial, en línea con las medidas ya tomadas el mes pasado por el Ejecutivo para la reconversión de algunas fábricas durante esta emergencia y así asegurar el abastecimiento en los hospitales.
CRÍTICA A CLÍNICAS PRIVADAS
El jefe de Estado también criticó a las clínicas privadas que presuntamente cobraron sobreprecios por pruebas de COVID-19 que son proporcionadas y procesadas de manera gratuita por el Instituto Nacional de Salud (INS), una entidad del Ministerio de Salud, y pidió una investigación por parte de los organismos pertinentes.
«Nosotros no cobramos por las pruebas. Es un servicio que tenemos que darlo para vencer a la enfermedad. No podemos hacer negocio con ello. Hay gente que quiere aprovecharse de estas circunstancias para beneficio propio, como con el oxígeno», indicó Vizcarra.
«No podemos permitir este comportamiento abusivo donde se lucre con el dolor y salud de los peruanos. Tiene que ser una sanción económica ejemplar, que es donde más duele», agregó.
El Consejo de Ministros también aprobó este jueves el decreto para pasar a la segunda de las cuatro fases de reactivación económica previstas por el Ministerio de Economía y Finanzas, a pesar de que la propagación del coronavirus sigue sin dar señales de mitigarse.
PASA BARRERA DE 5.000 MUERTES
El último boletín del Ministerio de Salud sobre el estado de la pandemia reveló que Perú superó este jueves los 5.000 fallecidos, tras pasar nuevamente el centenar de muertos diarios, al registrar 137 en las últimas 24 horas. En total son 5.031 decesos con el coronavirus como causa confirmada de la muerte.
Los casos acumulados subieron a 183.198 contagiados, lo que supone 4.284 nuevos infectados en las últimas 24 horas. De las 20.216 pruebas realizadas el miércoles, el 21 % salió positivo para el virus SARS-CoV-2.
Con la fase 2 de la reactivación económica, el Ejecutivo espera que su economía pase de funcionar al 50 % a más del 80 %, lo que incluye especialmente unas 780.000 compañías clasificadas como micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), y así recuperar unos 500.000 puestos de trabajo.
CONFINAMIENTO FLEXIBILIZADO
También se permitirá en esta nueva fase actividades físicas al aire libre por parte de la población, aunque Vizcarra recordó que el confinamiento continúa y que «el lugar más seguro es el domicilio».
Por ello pidió que sigan sin salir de sus casas las personas de la tercera edad, los estudiantes, las personas que no trabajen o que tengan alguna enfermedad que pueda suponer una complicación para su vida en caso de contraer el virus.
«Tenemos que reanudar estas actividades económicas pensando que es factible con el apoyo y colaboración de todos para seguir conteniendo la propagación del virus», apuntó el mandatario.
Perú es el segundo país con más casos declarados de COVID-19 en Latinoamérica y el décimo del mundo, aunque es el primero de la región en pruebas realizadas por cada millón de habitantes, lo que ha elevado rápidamente la detección del total de infectados. EFE