Desde el inicio de la emergencia sanitaria se han registrado 2.011 pacientes de coronavirus en el Azuay, de los que cerca de 1.700 personas se han recuperado en su propia casa, bajo vigilancia epidemiológica.
Los cuidados de los pacientes se vuelven de vital importancia, pero no todos saben que hacer en estos casos indica Diego Alvarado, Responsable de Provisión y Calidad de los Servicios de Salud en Azuay.
Esa falta de conocimiento puede derivar en nuevos contagios entre familiares y allegados, explica Alvarado.
La relación con los vecinos también puede representar un problema, ya que el temor al virus hace que las personas contagiadas sean estigmatizadas incluso tras superar la enfermedad.
Es el caso de Carla Parra, quien tras estar aislada bajo sospecha de COVID junto con su esposo, tuvo que cambiar de barrio puesto que, “ya no nos querían vender ni en la tienda”.
Cuidados
Diego Alvarado indica que ante la primera sospecha de ser portador del virus el paciente debe acudir a un centro de salud, donde le harán una valoración médica y de ser necesario le tomarán una prueba.
Si la persona da positivo lo principal es aislarla en un cuarto, de preferencia con baño propio. Durante la cuarentena una sola persona debe estar a cargo de su cuidado.
El cuidador debe separar una misma ropa y zapatos para entrar a ese cuarto y desinfectarlos constantemente.
El paciente debe usar mascarilla, guantes y bata médica aunque esté aislado, esto para evitar que el virus se propague por el cuarto.
La habitación debe estar bien ventilada y el paciente, si está en condiciones, puede hacer ejercicios suaves.
No hay restricciones en la comida pero dado que puede presentarse fiebre y diarrea es importante que el paciente esté bien hidratado.
Alvarado recuerda que no debe automedicarse, pues esto puede ocultar síntomas graves.
La comida debe servirse, de preferencia, en vajilla desechable, si no es el caso los utensilios deben desinfectarse con 3 cucharadas de cloro por un litro de agua.
Esa misma mezcla se debe mantener para desinfectar los espacios que ocupe el paciente y las fundas de basura, que deben ser rociadas, puestas en una funda adicional y rociadas nuevamente.
Si hay síntomas como falta de aire, fiebre elevada que no baja o diarrea, es preciso que el paciente acuda al hospital para recibir tratamiento, recordó el galeno. (JMM) (I)