La compañía Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) de Ecuador anunció este domingo que suspendió el transporte de crudo desde la Amazonía, debido a la amenaza generada por un deslizamiento de tierra que ha represado el río Coca en un sector cercano al paso de la tubería.
OCP informó en un comunicado de que suspendió el bombeo de crudo «como medida preventiva ante un deslizamiento que ocasionó un represamiento sobre el río Quijos (Alto Coca)».
Precisó que esa medida preventiva no afecta «la recepción y exportación de crudo» que realiza desde el puerto de embarque en la zona costera del país.
«El continuo monitoreo nos ha permitido tomar estas medidas preventivas que se suman a las ya implementadas, como son la construcción de variantes y drenaje de la tubería en ciertos sectores«, comentó Roberto Grijalva, gerente de Operaciones de OCP.
Según Grijalva, la compañía valorará «las condiciones que garanticen una operación segura» y que dependiendo de ello se podría reanudar este mismo domingo el bombeo de crudo.
OCP indicó que el deslizamiento ocurrió sobre el río Quijos, en un sector donde se une con el Marker, y añadió que en esa zona se han acumulado sedimentos que han represado completamente el cauce del afluente principal.
«Siguiendo el actuar responsable, OCP Ecuador detuvo el bombeo por precaución ante este fenómeno natural cuyo comportamiento es imprevisible«, advirtió Grijalva.
La tubería del OCP como las del estatal Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y del poliducto para el transporte de gasolina debieron suspender sus actividades el pasado 7 de abril, cuando un socavón en el sector de San Rafael (en el límite de las provincias amazónicas de Sucumbíos y Napo) provocó la rotura de los tres.
Tanto OCP como la estatal Petroecuador debieron construir unas variantes al recorrido de sus tuberías, ante el proceso de «erosión regresiva» que se ha registrado en la zona.
Ese proceso erosivo ya ha afectado varios sitios vecinos como la cascada San Rafael, que era considerada la más alta del país, pero que desapareció de manera súbita por un socavón.
Asimismo, varios estudios plantean que el fenómeno pone en riesgo a la planta hidroeléctrica «Coca-Codo-Sinclaire» y al tramo de una carretera entre las poblaciones de Baeza y El Reventador.
El OCP, de unos 500 kilómetros de longitud y que corre paralelo al SOTE, tiene una capacidad de transporte de 300.000 barriles de crudo por día y une los campos de extracción en la región Amazónica (noreste) con los puertos de embarque en la provincia costera de Esmeraldas (noroeste).
Ecuador, que produce unos 530.000 barriles de petróleo diarios, basa su economía en la exportación de crudo, una de las principales fuentes de ingreso de divisas para una economía que está completamente dolarizada desde el año 2000. EFE