OPINIÓN|
En medio de tanto escándalo de nuestros políticos y gobernantes ha sucedido el de los carnés de discapacidad emitidos en forma tan horrible por esas mafiecitas del Ministerio de Salud.
Pongámonos a pensar cómo sería la cosa si no se hubiese producido el percance de la avioneta de propiedad de Adum en la que fugaba –oportunamente alertado de su posible detención- el señor Daniel Salcedo. Pues sencillamente que los millares de esos carnés seguirían funcionamiento “maravillosamente” en poder de esa gavilla de gentes corruptas y desvergonzadas que los han venido utilizando para evadir impuestos y sobre todo importar vehículos de lujo para pasear su desvergüenza y cinismo y luego revenderlos con pingües ganancias.
Mientras las personas con reales discapacidades son obligadas por esas gentes del Ministerio de Salud a unos imponderables viacrucis, de esos que la burocracia sabe muy bien: vaya por aquí, vaya por allá, obtenga la firma de tal fulano y después el sello en la oficina de mengano, consiga exámenes médicos en tal parte, para luego decir que esos no valen y que debe ir a otro lugar y así hasta que quien tramita se despecha o se muere. Seguramente lo que quieren es la coima y si no se les da entonces el famoso carné no se consigue nunca.
Pero los que “manejan billete” como los Salcedo y similares, o influencia y poder como las decenas de jueces, de asambleístas –esos mangajos expertos en todas las formas de corrupción-, los demás funcionarios públicos y más tipejos, ni siquiera necesitan ir, ordenan a un empelado suyo que vaya a ese tal Ministerio, donde fulanito y traiga el carné que ya debe estar listo….
Este escándalo ya está siendo eclipsado por otros y todo quedará igual, los corruptos beneficiarios quedarán indemnes y habrá otros más para disfrutar de esta fiesta de podredumbre y corrupción. (O)
