Redacción El Mercurio Web
Yaku Pérez ha anunciado este miércoles 2 de septiembre que presentará su renuncia a la Prefectura del Azuay la primera semana de octubre para enfocarse en la campaña presidencial, carrera en la que tomará parte como candidato de Pachakutik tras recibir el apoyo mayoritario dentro de las decisiones que han tenido lugar en el ámbito del movimiento.
“Me quedaré hasta la primera semana del mes de octubre (…) Presentaré la renuncia ante el consejo de la Cámara Provincial”, dijo Pérez esta mañana durante una rueda de prensa en la sede de Pachakutik en Cuenca.
Respecto a quien lo sucederá una vez que abandone el sillón provincial, el político y abogado cuencano de 51 años puntualizó que “se quedará» según lo que diga al respecto “la Constitución y obviamente lo que aprueben los señores consejeros provinciales”.
Integrante de la nacionalidad kichua cañari y elegido Prefecto del Azuay en las elecciones seccionales de febrero de 2019 tras un sorpresivo triunfo sobre los favoritos María Cecilia Alvarado y Esteban Bernal, en el curso de la rueda de prensa de este miércoles Pérez se preguntó a sí mismo “¿cómo quedará” el Gobierno Provincial y él mismo se respondió que “va a quedar abierta la trocha para continuar el camino y aspiramos que vaya en la misma línea”.
“¿Cómo quedará? (…) Los documentos siempre han estado ahí, transparentemente”.
Pérez enfatizó que de llegar a la presidencia reducirá el número de asambleístas “por lo menos a la mitad”, y puntualizó que a lo mucho se contemplaría la posibilidad de “uno por provincia más la fracción de uno más por cada 100.000 habitantes”.
“¿Para qué tanto asambleísta? (…) ¿Para qué, con honrosas excepciones, tanto vago?”, se cuestionó.
Pérez dio el batatazo en el tablero electoral y sorprendió a propios y extraños al imponerse en la carrera hacia la Prefectura con un discurso particularmente ecologista y pro medioambiente que caló sobre todo en los millennials, una generación nacida entre principios de los 80 y principio de los 90 -según se han puesto de acuerdo los sociólogos- sensible a temas medioambientales y a asuntos como la corrupción y la degradación moral de los políticos.
Pero de otro lado Yaku Pérez ha sido duramente cuestionado por un sector de la opinión pública azuaya por enfocarse con vehemencia en su lucha contra la minería y en sus diferentes acciones estratégicas en procura de posicionar su nombre a nivel nacional, precisamente por sus no nuevas pretensiones presidenciales en detrimento de atender con mayor energía y tiempo otras competencias que según el Cootad atañen a los gobiernos provinciales, como la vialidad, un asunto también históricamente preocupante en el Azuay.
Esta semana la Corte Constitucional negó por tercera ocasión el pedido de Pérez de llevar a cabo una consulta popular en el Azuay sobre la minería. Él ha ido tres veces a Quito acompañado de sus seguidores a plantear la referida petición bajo la consigna de “proteger, preservar y y salvar el agua de los cuencanos”.
