Una marcha que partió desde San Blas hacia la Gobernación del Azuay, donde le aguardaba un fuerte operativo de control, se desarrolló la tarde de ayer en Cuenca con el objetivo de pedir cambios al Gobierno Nacional.
Gremios de trabajadores, movimientos sociales y ciudadanos se unieron a la marcha por las calles del Centro Histórico, bajo constante resguardo policial.
Frente a la Gobernación del Azuay, dirigentes de los gremios emitieron discursos exigiendo que el Gobierno no dé paso a nuevos impuestos y formule una política social en favor de los afectados por la pandemia, tanto en su salud como en su situación económica.
La marcha se diluyó pasadas las 18:30 sin que se registren desmanes o enfrentamientos físicos entre los manifestantes y la Policía Nacional, que durante la marcha mantuvo sobrevuelos de helicóptero y patrullajes en el Centro Histórico para evitar actos violentos.
Óscar Reinoso, presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), explicó que la protesta se da por la liberación del precio de los combustibles, la exigencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) de revisar el IVA, y lo que consideran un abuso contra los trabajadores a través de la Ley Humanitaria.
“La lucha del 2019 por el precio de los combustibles queda en nada con las medidas que adoptó el Gobierno a mediados de año, no contentos con eso, se firma un acta con el FMI en el que nos quieren subir el IVA al 15 %”, afirmó el dirigente.
Otra de las exigencias es la estabilidad laboral, afectada por la crisis económica. “Pedimos que no haya más despidos en el sector público o privado” dijo Reinoso, quien refirió que las normas de la Ley Humanitaria que permiten reducir salarios “son una forma de precarización”.
Médicos
En la jornada previa, el Colegio de Enfermeras del Azuay organizó una protesta pacífica frente a la Gobernación del Azuay, con la exigencia de que se devuelva los contratos a quienes fueron contratados de forma ocasional durante la emergencia sanitaria.
Las enfermeras afirman que el trabajo en los hospitales y casas de salud pública sigue siendo extenuante, por lo que la necesidad de personal de enfermería no ha dejado de ser importante tras el confinamiento.
Esta semana también se cumplió un plantón de los profesionales de la salud, buena parte de ellos médicos o paramédicos, quienes efectuaron una protesta para exigir que se deroguen los artículos 10 y 40 del reglamento a la Ley Humanitaria.
Dichos artículos hacen referencia a la contratación del personal médico a través de nuevos concursos de méritos, lo que dejará sin empleo a decenas de trabajadores a nivel nacional, indicó Cristian Gutiérrez, dirigente del gremio. (JMM) (I)