Los migrantes serán un «motor fundamental» en la recuperación de las economías y el futuro desarrollo de los países afectados por la emergencia derivada de la pandemia de la covid-19 y los efectos de las tormentas tropicales Eta e Iota, dijo este martes la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
A pesar de las circunstancias, los movimientos migratorios «no se han detenido» y las personas migrantes «siguen contribuyendo en gran medida el desarrollo sostenible de sus comunidades de origen, tránsito y destino», dijo el jefe de la misión de la OIM para El Salvador, Guatemala y Honduras, Jorge Peraza.
«Me atrevo a aseverar de que van a ser motor fundamental para la recuperación económica de nuestra sociedad, por eso quiero darles muchas gracias a todas las personas migrantes por sus aportes y por el futuro desarrollo de nuestro mundo», subrayó.
Peraza participó hoy en el foro virtual «Reimaginando la movilidad humana», con motivo del Día Internacional del Migrante, que se celebra el 18 de diciembre.
«Cómo ustedes saben este año las emergencias causadas por la pandemia de covid-19 y las recientes tormentas y huracanes que han impacto la región del norte de Centroamérica han tenido serias implicaciones en las poblaciones migrantes y sus familiares», señaló.
Miles de personas han sufrido la devastación de estos fenómenos naturales en Centroamérica, principalmente Honduras, Guatemala y Nicaragua, que afectaron la región con apenas 13 días de diferencia.
Eta e Iota han agravado la crisis humanitaria que ya vivían los países centroamericanos, incluso antes de la emergencia por la pandemia de la covid-19.
Migrantes expuestos a más vulnerables
El coronavirus y los efectos de las tormentas han expuesto a los migrantes «a mayores grados de vulnerabilidad, donde se suman factores como la reducción de recursos materiales, un lugar seguro donde estar en las diferentes etapas del ciclo migratorio», enfatizó.
Aunado a ello, añadió el jefe de misión de la OIM para el Triángulo Norte de Centroamérica, la covid-19 ha tenido «serias implicaciones en las capacidades de los Estados de brindar servicios de salud integrales y gratuitos».
El impacto económico que ha tenido la covid-19 en los países centroamericanos ha generado «falta de empleo, reducción de ingresos», subrayó Peraza, quien dijo además que las restricciones de movilidad han expuesto a los migrantes «a una serie de vulnerabilidad adicionales».
Aseguró que muchos migrantes varados en países de acogida han tenido «dificultades muchas veces de poder regresar o incluso personas en nuestra región que tuvieron que buscar alternativas para retornar a sus países».
Un futuro próspero y sostenible
El Día del Migrante se conmemora en medio de «profundas transformaciones», por lo que es necesario «profundizar» en lograr que las realidades que «nos duelen como humanidad, no existan más», dijo la coordinadora residente del Sistema de Naciones Unidas en El Salvador, Birgit Gerstenberg.
La migración irregular e insegura implica «el riesgo de perder la vida, la libertad, la integridad» para los migrantes, que además sufren discriminación en la ruta hacia su destino, añadió.
Este año ha sido «atípico y complejo para todos, la pandemia por covid-19 ha impactado más fuertemente a quienes están en condiciones de vulnerabilidad como los que migran, desplazados, buscan refugio o son retornados a sus países», enfatizó.
El cierre de las fronteras y de las economías «les ha causado complicaciones adicionales», subrayó Gerstenberg, quien indicó que estamos ante «una oportunidad» para lograr que la solidaridad y la humanidad prevalezcan.
La funcionaria del Sistema de Naciones Unidas instó a trabajar por un «futuro próspero y sostenible», para las personas migrantes, desplazadas, refugiadas, que buscan asilo o retornan a sus países. EFE