El mensaje de audio en WhatsApp de un niño, que le avisa a su profesora (a quien identifica como “profe Nancy”) que se retrasará en enviarle la tarea porque tiene que cuidar a su cochina, que está pariendo, se volvió viral en redes sociales.
La justificación, que resulta peculiar y hasta anecdótica, además de inocente y sincera, provocó una serie de reacciones, especialmente en Facebook y Twitter, que son las plataformas donde más se reprodujo esta nota de voz.
El pequeño se llama Juan Gabriel, tiene nueve años y es estudiante de la escuela de Guachapala, un cantón de unos 4.000 habitantes, que está en la zona nororiental de la provincia del Azuay.
Vive con su madre y hermana, y está en quinto de básica. El plantel tiene unos 350 estudiantes y es de los más grandes del distrito, que incluye además de Guachapala, otros cantones como Sevilla de Oro y Paute.
El mensaje enviado por Juan Gabriel si bien resulta pintoresco evidencia la realidad de los alumnos del sector rural, que al estar en casa, con clases online, tienen que combinar el aprendizaje escolar con las tareas domésticas.
La “profe Nancy” es Nancy Monroy, una joven madre y maestra, quien ganó el concurso Quiero Ser Maestro 6, del Ministerio de Educación, y este año lectivo ingresó como docente de esta institución.
“Ese día Juan Gabriel en la mañana ya nos había comentado en la clase que habíamos tenido que él iba a estar pendiente de la chanchita que estaba en labor de parto…”, relató Monroy.
Y recordó: “al momento que él me envió el audio, fue al medio día, que me decía que no iba a poder enviarme la tarea a tiempo porque estaba encargado de supervisar que la chanchita esté bien”.
Monroy señaló que enseguida comprendió la situación de Juan Gabriel, dado que está consciente de que los niños tienen otras actividades propias de sus casas, aparte de las clases.
La tarea que debía hacer Juan Gabriel era un folleto acerca de la natación y cuales son los requisitos para tener un buen desempeño dentro de esta actividad deportiva.
Nancy Monroy reconoció que el trabajo en el sector rural con las clases vía web tiene ciertas dificultades sobre todo por las limitaciones que tienen algunas familias que no pueden acceder a equipos tecnológicos ni tampoco a conexión de Internet.
Contó que en ciertos casos les entrega de manera personal a sus alumnos las agendas de clases y asimismo les da la posibilidad de que vayan a su casa para que reciban las materias de forma presencial.
A decir de Monroy para los maestros dar clases online también ha significado un reto, dado que han debido comprar computadores y dispositivos de mayor capacidad, además de contratar internet. Ella tiene 23 alumnos.
“Todos los docentes estamos abiertos a esa empatía con los niños, a tener esa consideración, porque aparte de docentes, de ser profesionales, nosotros también somos padres de familia…”, reflexionó. (CSM)-(I)
