La violencia intrafamiliar y la violencia de género hacia la población más vulnerable, ejercida a través de sus diferentes tipologías, son algunas de las mayores problemáticas que se registran en la localidad dentro del gran contexto de inseguridad que vive la ciudadanía.
Es merecedor reconocer que las instituciones que trabajan a favor de la seguridad ciudadana, tienen la firme intención de reducir las cifras en el marco de sus competencias: prevención, atención, intervención, restitución y demás; no obstante, mientras el ser y el hacer de un funcionario público no estén alineados con el propósito universal “vida libre de violencia”, difícilmente el panorama podrá mejorar.
Más allá de lo jurisdiccional, existe la convicción del servicio público que no en vano se apega a un objetivo de bienestar común; pero, si mientras por un lado se trabaja en concientizar y sensibilizar a la población y actores involucrados y por otro, los llamados a… no hacen más que dar su mínimo esfuerzo, no podemos trabajar con entereza y no podríamos cambiar esta realidad. Recordemos qué para ser y hacer ciudad, la coyuntura de la gestión debe ser eficiente.
El reconocernos es el ser y la voluntad es el hacer. (O)