El expresidente estadounidense Donald Trump superó este sábado su segundo «impeachment» al ser absuelto por el Senado del cargo de «incitar una insurrección» en el asalto al Capitolio del 6 de enero, inmediatamente después, emitió un comunicado para aludir a la posibilidad de volver a la política.
En un juicio político fugaz, que duró solo cinco días, el guión se cumplió según lo esperado y los republicanos del Senado, constituido como jurado en este juicio político, salvaron a Trump e impidieron que los demócratas se hicieran con suficientes apoyos para condenarle.
Solo siete republicanos votaron a favor de condenar a Trump por «incitar una insurrección»: Susan Collins, Lisa Murkowski, Mitt Romney, Ben Sasse, Bill Cassidy, Pat Toomey y Richard Burr.
57 A FAVOR DE CONDENAR A TRUMP, 43 EN CONTRA
El marcador final quedó con 57 a favor de la condena y 43 en contra, unas cifras insuficientes para los demócratas que necesitaban una mayoría de 67 votos para sancionar al examandatario, algo que desde el principio parecía altamente improbable debido a la influencia que Trump mantiene en su base de votantes.
A pesar del golpe para los demócratas, se trata del «impeachment» presidencial que más apoyo bipartidista ha recibido de los cuatro de la historia de EE.UU., una lista que incluye los procesos contra Andrew Johnson (1865-1869), Bill Clinton (1993-2001) y los dos contra Trump.
A favor de absolver al expresidente votó el líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, una figura muy influyente en el partido y que al principio se había mostrado abierto a una condena.
Sin embargo, esta mañana, el equipo de McConnell filtró a la prensa que pensaba absolver al exmandatario, lo que con toda seguridad influyó en el voto de algunos de sus correligionarios.
Tras la votación, McConnell sorprendió con un discurso muy duro contra Trump en el que le consideró «prácticamente y moralmente responsable» de lo que pasó en el Capitolio; pero, argumentó que debe rendir cuentas ante la Justicia y no en el Senado.
«Él (Trump) no se ha librado de nada todavía. Tenemos un sistema criminal en este país, tenemos un sistema civil. Y ningún expresidente es inmune a ninguno de los dos», señaló McConnell ante el silencio del hemiciclo, uno de los lugares atacados por los simpatizantes del exmandatario el 6 de enero.
UN GIRO INESPERADO DE GUIÓN
A pesar de lo previsible del resultado, las últimas horas estuvieron envueltas en drama debido a unas inesperadas revelaciones de la congresista republicana Jaime Herrera Beutler, de línea moderada y que fue uno de las 10 republicanos que votó en la Cámara Baja a favor del «impeachment».
La noche del viernes, Herrera Beutler desveló en un comunicado implorantes detalles de una llamada telefónica entre Trump y el líder republicano en la Cámara Baja, Kevin McCarthy, durante el asalto al Capitolio del 6 de enero.
Herrera Beutler, que conoce el contenido de la llamada porque McCarthy se lo contó, asegura que Trump se negó a ayudar a los legisladores cuando una muchedumbre irrumpió en el Capitolio.
En concreto, según la legisladora, cuando McCarthy se puso en contacto con el presidente para que pidiera a sus seguidores que suspendieran el asalto, este se negó.
«Bueno, Kevin, supongo que esta gente está más enfadada por las elecciones que tú», le habría respondido Trump a McCarthy.
Estas revelaciones hicieron que, por sorpresa, el Senado de EE.UU. votara el sábado por la mañana a favor de citar testigos; aunque, finalmente, optó por recular en esa decisión que habría prolongado semanas el juicio político.
¿VOLVERÁ TRUMP A LA POLÍTICA?
El día acabó en absolución y solo unos minutos después de que el Senado anunciara el resultado, Trump emitió un comunicado para celebrarlo y para avisar de que su movimiento para «Hacer a EE.UU. grande de nuevo» («Make America Great Again») solo «acaba de empezar».
«Nuestro movimiento histórico, patriótico y hermoso para ‘Hacer a EE.UU. grande de nuevo’ solo acaba de empezar. En los meses venideros, tengo mucho que compartir con ustedes y espero continuar nuestro increíble viaje juntos para lograr la grandeza estadounidense para toda nuestra gente. ¡Nunca ha habido nada igual!», dijo en un comunicado.
Con esas palabras, Trump jugó con la posibilidad de volver a la política sin ofrecer detalles concretos, aunque ya anteriormente abrió la puerta a presentarse a las elecciones presidenciales de 2024.
Su comunicado no incluyó ninguna condena a lo ocurrido durante el asalto de sus simpatizantes al Capitolio el 6 de enero, una de las jornadas más convulsas de la historia de EE.UU. y en la que murieron cinco personas, entre ellas un policía.
Este proceso pasará a la historia en dos sentidos: porque convirtió a Trump en el primer presidente estadounidense en afrontar y ser absuelto en dos juicios políticos -tras el celebrado hace un año por sus presiones a Ucrania- y porque nunca antes se había sometido a un «impeachment» a un mandatario cuando ya no está en el poder. EFE