«Desde el principio me di cuenta de que veo el mundo de forma diferente a todos los demás», comienza diciendo Stone en las imágenes mientras camina por las calles del Londres de los años 70 frente a los famosos almacenes «Liberty» del barrio del Soho.
La película profundiza en los años jóvenes de Estella (Stone), una inteligente estafadora decidida a triunfar con sus diseños, que llaman la atención de la baronesa Von Hellman, interpretada por Emma Thompson, y cuya tormentosa relación será el origen de la perversa, y ya conocida, Cruella de Vil.
«Nací brillante, mala y un poco loca. Soy Cruella», pronuncia una Stone caracterizada con un look extravagante y «punk», en la línea de la versión animada del personaje de «101 dálmatas», y que muchos han comparado con el de otra villana: Harley Quinn, y con Margot Robbie, la actriz que le dio vida en la pantalla.
En esta ocasión, al igual que Robbie en «I Tonya», Stone estará a las órdenes del director australiano Craig Gillespie, en un elenco que completan Mark Strong, Joel Fry o Emily Beecham y que también contará con la diseñadora de vestuario dos veces ganadora del Oscar Jenny Beavan para potenciar la estética tétrica del film. EFE