Las regiones españolas más afectadas por la tercera ola de coronavirus comienzan a flexibilizar las restricciones adoptadas en las últimas semanas ante el descenso generalizado en el número de contagios y en la incidencia del virus, que se acerca ya a niveles cercanos a la estabilización.
Ayer viernes, cuando se conocieron los últimos datos facilitados por el Ministerio español de Sanidad, ya que los fines de semana no se publican cifras, España registraba 294,7 casos por cada 100.000 habitantes, cifra similar a la de principios de enero.
También habían disminuido el número de fallecidos, 67.101 desde le inicio de la pandemia, y los casos positivos, que se elevan en total a 3.133.122.
El descenso, según los datos del Ministerio, se nota también en la presión en las ucis, que se situaba ayer en el 34,7 % (seis décimas menos que el jueves), mientras que la ocupación de camas hospitalarias por enfermos de covid cayó seis décimas hasta el 12,8 %.
Estos indicadores, más los aportados por las autoridades sanitarias regionales, han llevado a muchas comunidades autónomas al relajamiento de las medidas de contención de virus este fin de semana, a pesar de que la incidencia acumulada del virus -cerca de los 250 casos por cada 100.000 habitantes considerados como fuera del riesgo extremo-, está muy lejos aún de permitir dar por controlada la pandemia.
Algunas de las restricciones que se han levantado tienen que ver con la ampliación de los aforos en los locales de hostelería y supermercados y la apertura de cines, teatros y auditorios.
También con la apertura de los centros de mayores para que los residentes puedan recibir visitas de sus familiares o salir del centro, siempre que estén libres de covid-19 y que se haya completado la vacunación.
Las autoridades sanitarias españolas insisten en que a pesar de que parece haberse contenido la tercera ola de la pandemia no hay que bajar la guardia porque el peligro no ha remitido.
Sin embargo, como cada fin de semana, se multiplican los actos de diversión ilegales en muchas ciudades.
La pasada noche la Policía Municipal de Madrid desalojó tres pisos turísticos en un edificio del centro de la capital dónde se estaban celebrando fiestas ilegales e interpuso 44 denuncias por incumplimiento de las medidas sanitarias.
Asimismo fueron disueltas fiestas irregulares en domicilios particulares de ciudades como Gijón o Bilbao (norte), mientras que la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria detectó una despedida de soltero en que participaban nueve personas (cuando el máximo permitido es cuatro) en la azotea de una empresa ubicada en la zona industrial. EFE