Desde la tarde del martes 23 de febrero, los familiares de internos de la cárcel de Cuenca permanecen en los exteriores del Centro Forense de la ciudad, a donde fueron trasladados los cuerpos de los 34 presos asesinados un día antes.
Según un comunicado de la Fiscalía, un experto en personas fallecidas durante matanzas efectúa el reconocimiento exterior e identificación técnica de los cuerpos, de los cuales dieciocho se encuentran desmembrados.
El fiscal provincial, Leonardo Amoroso, informó que se coordinó con el Servicio Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses para que un médico experto en Antropología Forense se traslade a Cuenca, y que, además, cuatro médicos forenses se sumen a los dos que trabajan en la ciudad para la práctica de autopsias.
Hasta el momento, las autoridades no han dado detalles sobre la lista de fallecidos. Solo se conoce que todos cumplían penas en el pabellón de máxima seguridad.
La Fiscalía solicitó los videos de las cámaras del centro carcelario y de un dron del Consejo de Seguridad Ciudadana de Cuenca, que serán analizados para identificar a los presuntos responsables de los hechos.
Mientras, los Jueces de Garantías Penales del Azuay, Fabián Romo y Guido Chalco, solicitaron al director de la cárcel de Turi, Rómulo Montalvo, información en un plazo de 72 horas, con el mayor detalle posible sobre las acciones tomadas por las autoridades una vez que iniciaron los hechos violentos. (I)