El lanzamiento se efectuó con un vehículo polar PSLVC51 a las 10.24 hora local (04.54 GMT), desde una plataforma en la base de Sriharikota, en el estado suroriental de Andhra Pradesh, informó la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO).
«El satélite primario Amazonía 1 se separó con éxito del PSLVC51», anunció minutos después la ISRO, en su cuenta oficial de Twitter.
En el lanzamiento, el primero de NSIL, la rama comercial de la ISRO, se enviaron también otros 18 satélites secundarios, entre ellos tres de institutos indios.
«Felicidades al presidente Jair Bolsonaro por el exitoso lanzamiento del satélite Amazonía 1 por el PSLV-C51. Este es un momento histórico en nuestra cooperación espacial y mis felicitaciones a los científicos de Brasil», celebró en Twitter el primer ministro indio, Narendra Modi.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores indio destacó también cómo «líderes» de los dos países «identificaron el sector espacial como un área importante de colaboración», subrayando la firma del primer acuerdo en esta área en 2002.
El Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), el organismo estatal de Brasil responsable del desarrollo y operación del Amazonía 1, había informado de la llegada a finales de diciembre del satélite a la India, y que tras su lanzamiento sería colocado en una órbita a 752 kilómetros de la tierra.
Con cuatro metros de altura, el satélite captará imágenes de alta resolución para auxiliar en los diferentes programas de observación y vigilancia de la tierra con que cuenta Brasil, incluyendo el destinado a la fiscalización de la deforestación de la Amazonía.
Las imágenes del Amazonía 1 complementarán las de los satélites CBERS-4 y CBERS-4A, que Brasil ya utiliza para observar de forma autónoma la tierra y sin necesidad de depender de imágenes de equipos de otros países.
Los CBERS son satélites desarrollados conjuntamente por Brasil y China en el marco del Programa Chino-Brasileño de Satélite de Vigilancia Remota (CBERS).
Brasil y China han desarrollado y lanzado conjuntamente hasta ahora cinco satélites, dos de los cuales continúan en operación, en un programa de cooperación que ayudó al INPE a dominar la tecnología de vigilancia remota con cámaras y sensores para la observación de la tierra.
La experiencia adquirida con el CBERS le garantizó a Brasil la autonomía para desarrollar, fabricar, montar y operar el Amazonía 1 totalmente en el país. EFE