«Ningún país puede resolver el problema de la crisis climática y hoy en día tampoco ningún país duda de que haya una crisis», afirmó Kerry en una conferencia de prensa celebrada en Dacca.
Durante su breve visita a Bangladesh de un día, Kerry abordó la cooperación contra el cambio climático con la primera ministra del país, Sheikh Hasina, el ministro de Relaciones Exteriores, AK Abdul Momen, y el ministro de Medio Ambiente, Shahab Uddin.
En este sentido, Momen presentó a Kerry el programa que ha emprendido Bangladesh para abordar la crisis medioambiental, que incluye la creación de un fideicomiso climático, una hoja de ruta energética nacional, un plan de acción contra el cambio climático, además de la creación de más de 14.000 refugios.
Según el Centro de Monitoreo de Desplazamientos Internos, cerca de 700.000 bangladesíes tienen que huir al año de sus hogares por desastres naturales debido al cambio climático.
El número de desplazados por el cambio climático en Bangladesh podría llegar incluso a los 13,3 millones en 2050, siendo éste el principal motivo de la migración interna del país, según un informe del Banco Mundial publicado en marzo de 2018.
Kerry aprovechó además la visita en Dacca para trasladar a la mandataria bangladesí la invitación del presidente estadounidense, Joe Biden, a la cumbre virtual contra el cambio climático organizada por Estados Unidos, que se celebrará el próximo 22 y 23 de abril.
EE.UU. espera que la reunión sirva para preparar la Cumbre del Clima de Glasgow (COP26), que debía haberse celebrado a finales de noviembre de 2020, pero que fue pospuesta por la pandemia de coronavirus y está previsto que tenga lugar entre el 1 y el 12 de noviembre de este año.
«Creemos que Estados Unidos puede marcar la diferencia en ese sentido y el presidente Biden está decidido a hacerlo, porque es lo correcto», subrayó Kerry.
LA INDIA
El enviado especial de Estados Unidos para el Cambio Climático aterrizó en Bangladesh después de concluir su visita oficial de cuatro días a la India, en donde abordó con las autoridades del país los problemas relacionados con la crisis medioambiental.
Durante su estancia, Kerry se reunió con el primer ministro indio, Narendra Modi, para apoyar la propuesta de la India en aumentar la capacidad instalada de energía renovable de 450 GW, como parte del objetivo por reducir las emisiones de CO2 en el planeta en un 55 % de cara a 2030 fijado en los Acuerdos de París.
«Creemos que es un objetivo fantástico. Creemos que es un objetivo poderoso. Queremos asegurarnos de que estamos facilitando la posibilidad de alcanzar ese objetivo», destacó el enviado estadounidense en una sesión informativa que ofreció ayer a los medios.
Para el ex secretario de Estado de Estados Unidos, la India es un socio «clave» en la lucha contra el cambio climático por su «enorme preocupación» por la relación de todos «con el planeta, el medio ambiente y el entorno» que nos rodea.
Kerry admiró además la labor de los jóvenes activistas que empujan al mundo hacia el progreso medioambiental, como es el caso de Fridays For Future, de la que es miembro la activista india Disha Ravi, que llegó a estar encarcelada por participar en la elaboración de un documento en apoyo a la protesta campesina en la India. EFE