El balance del ECU-911 sobre las medidas impuestas para reducir la rapidez de los contagios de COVID-19 a nivel nacional es positivo. Así lo indicó ayer Juan Zapata, director nacional de la entidad, pero a pese a esto el riesgo de infección sigue siendo alto.
Ricardo Vizueta, vocero del Ministerio de Salud Pública (MSP) informó que el número reproductivo efectivo en tiempo real (RE), un indicador que establece cuántas personas se contagian por cada caso comprobado de COVID, pasó de 1,24 a 0,86 en el Azuay en las últimas 4 semanas. “Esto indica que la velocidad de contagio se ha reducido”, explicó.
El investigador y docente universitario, Bernardo Vega, quien hace un seguimiento semanal del avance de la pandemia, informó que en la última semana se registraron 438 casos de COVID en el Azuay lo que representa una “ligera disminución del 10 % en el número de casos”.
Los datos del ECU-911 también muestran una reducción en el número de alertas por complicaciones de casos COVID. Este indicador pasó de 43 llamadas diarias a finales de abril a 15 en el último fin de semana, una cifra incluso inferior a las 19 alertas por día registradas antes de las restricciones.
Otro de los indicadores que muestra cifras positivas es el referente a aglomeraciones. En el último mes estas pasaron de 71 a 19 por día con la excepción de la semana previa del Día de la Madre en la que se registraron hasta 37 aglomeraciones por jornada.
El cumplimiento de las medidas también mejoró. El número de alertas por no acatar el toque de queda pasó de 30 a 7 por día, mientras que las fiestas clandestinas cayeron de 100 a 41 durante el último fin de semana.
Un registro que no termina de ser positivo es el de exceso de mortalidad que pasó de un deceso diario antes de las restricciones a 5 durante el último domingo. Bernardo Vega indica que en la última semana se registraron 8 muertes más que en la semana inmediata anterior.
Por disposición del MSP los hospitales no pueden brindar información sobre la ocupación de camas de unidades de cuidados intensivos (UCI). Juan Zapata se limitó a señalar que a nivel nacional este indicador es del 92,05 %, pero esta cifra no se aplica a Cuenca donde según el último reporte oficial todos los respiradores para pacientes COVID están en uso.
En donde sí se registra una reducción de la demanda de camas UCI es en el sector privado. La semana anterior se logró liberar 7 respiradores en clínicas y la ocupación pasó del 100 al 80,5 % por primera vez en 4 semanas.
El coordinador de Salud, Julio Molina, explicó que el 80 % de los pacientes que ocupan camas UCI en los hospitales públicos fueron internados antes del confinamiento por lo que aún habrá que esperar al menos 15 días para medir el real efecto de las medidas. Mientras tanto, la autoridad pidió a la ciudadanía que mantenga la prevención necesaria. (JMM) (I)