La pandemia hizo que Belén Carpio funde su propio club de baloncesto
La necesidad de sobrevivir en la pandemia hizo que la seleccionada nacional Belén Carpio creara su propio club de baloncesto. “Le dije a mi familia: voy a hacer un vacacional por zoom”, recuerda. La acogida que tuvo le llevó a crear un proyecto más ambicioso, aunque algunas interrogantes rondaron por su cabeza.
“Me di mil vueltas, pensando: y ahora, será de sacar un club, será que nos va bien, y así yo sola, dándome golpes en la pared por poco, y dije: ya nada, lancémonos, sea cual sea el resultado, si no intentamos, quién sabe cómo nos va a ir”.
En septiembre de 2020 empezó los trámites ante la Secretaría del Deporte y con el asesoramiento de su compañera Dayana Salcedo, capitana de la Tricolor, pudo inscribir al Club ATUC en la categoría de Especializado en Alto Rendimiento.
El nombre significa ‘Lobo’ en quechua. “Algunos tienen como significado de lobo algo feroz, solo, pero para nosotros significa vincular a la familia, los grandes cuidar a los pequeños, los pequeños respetar a los grandes. Nosotros queremos formar no solo deportistas sino personas de bien que sepan afrontar problemas dentro y fuera de la cancha”.
Belén está por graduarse como arquitecta en la Universidad del Azuay. En julio prevé sustentar la tesis. “Para mí la prioridad siempre ha sido el básquet desde guagüita por eso la locura del club. Obviamente, no voy a dejar a un lado todo lo que me ha costado el estudio, pero lo que me hace feliz es estar en el club”.
Jóvenes entre los 15 y 23 años son sus alumnos. Han participado en algunos certámenes organizados por la Federación Ecuatoriana de Basketball. Con la sub-13 y sub-17 varones y con la sub-23 damas clasificaron a las finales del Nacional 3×3 que serán en Guayaquil en los próximos meses.
Liga Nacional U23
Al tiempo que impulsa sus proyectos personales, Belén refuerza al Club Henko, de Azogues, en la Liga Nacional de Desarrollo U23, junto con una de sus pupilas y seleccionada azuaya Sthefany Narváez. Es una de las más experimentadas del equipo que está integrado por jugadoras entre los 15 y 20 años de edad.
Juega de alera, pero con su experiencia trata de apoyar en todas las posiciones. El amor que le tiene al deporte y que le inculcaron en gran medida los profesores Patricia Pinos y Patricio Ávila, hace que no escatime esfuerzos para viajar a Azogues y asistir a los entrenamientos que se realizan de 05:00 a 07:00. (BST)-(D)
